Moncloa ultima la ley que ilegalizará la Fundación Francisco Franco

El Gobierno sigue con la presión al Partido Popular para la aprobación de los presupuestos y la renovación del CGPJ acusando a los de Casado de mantener una posición "incompatible con las reglas democráticas"

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Joan Guirado
  • Joan Guirado
  • Corresponsal de Gobierno y Casa Real. Siguiendo la actividad del presidente y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y del Rey de España. También política catalana.

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha anunciado este martes, tras el Consejo de Ministros, que el Ejecutivo dará luz verde la semana que viene a una ley de memoria histórica «para reencontrarse consigo mismo». Se trata de una ley que, entre otras cosas permitirá la ilegalización de la Fundación Franco afirmando que «no podrá haber fundaciones con dinero público que enaltezcan totalitarismos o figuras dictatoriales”. La socialista avisa que esta ley «toma decisiones muy, muy tajantes» porque es «muy importante» que España no tenga «víctimas en fosas comunes de manera ignominiosa». El Ejecutivo promete que «habrá un plan de exhumaciones con recursos públicos y un banco de ADN»

Sin reproches a Iglesias

El Gobierno no quiere hacer más fuego del incendio provocado, este martes, por el vicepresidente segundo Pablo Iglesias durante una entrevista radiofónica. Sus palabras, sobre una supuesta bronca mantenida con Pedro Sánchez a cuenta de la huída del Rey emérito y los silencios al preguntarle por su compañera de gabinete, la titular de Economía y Competitividad Nadia Calviño, han provocado el enfado de sus socios del PSOE. Tras el Consejo de Ministros, preguntada por la polémica desatada por Iglesias, la portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, ha preferido ningunear al vicepresidente y «respetar el secreto del Consejo de Ministros».

Montero, pese a que Iglesias ha aireado conversaciones con el jefe del Ejecutivo, ejerciendo según dirigentes socialistas de «oposición al Gobierno, solo ha manifestado que el vicepresidente «ha expresado de forma clara su preferencia y tiene que ver con los apoyos que este Gobierno tuvo con la investidura». Sostiene que «las conversaciones entre Sánchez e Iglesias no las conocemos, hay que dejarlas en el marco de la relación bilateral del Presidente con cada miembro de su equipo».Un intento de evitar más polémicas, entre los dos socios de la coalición, en un momento en el que los apoyos en los que apoyarse para aprobar los presupuestos o la renovación del Consejo General del Poder Judicial está tensionando de nuevo la relación entre el Partido Socialista y Podemos.

Tampoco la vicepresidenta primera Carmen Calvo, enemistada públicamente con Pablo Iglesias, ha querido ahondar en la herida abierta por su compañero. La socialista ha recordado que «cuando tomamos posesión del cargo todos los ministros prometemos guardar secreto de las deliberaciones del Consejo de Ministros, y no seré yo quien lo rompa». En este sentido, sobre las palabras del líder de Podemos en relación a la jefatura del Estado, Calvo ha puesto en valor «la magnífica relación del Gobierno con el jefe del Estado». La vicepresidenta, en relación a la decisión de la fiscalía de investigar los pagos de Podemos a Neurona, pide separar a los partidos que apoyan el Ejecutivo de los miembros del Gobierno.

Pressing al PP

La portavoz del Gobierno, con palabras de Pedro Sánchez, ha vuelto a dejar claro al vicepresidente segundo Pablo Iglesias que «no es momento de vetos ni trincheras, es momento de buscar consenso». De hecho el Ejecutivo vuelve «a hacer un llamamiento al Partido Popular para que no sea ponga de perfil y se sienta interpelado ante las necesidades de los ciudadanos».

Entre esas necesidades, añade María Jesús Montero, está la renovación de las instituciones del Estado. Afirma la portavoz que «nos sentimos consternados cuando oímos al líder del Partido Popular con la actitud obstruccionista en la renovación de las instituciones». Considera que la posición «de bloqueo» de los populares, a quienes también les reclama apoyo a los presupuestos, es «incompatible con las reglas democráticas».

Tres millones de vacunas

La ministra portavoz ha anunciado que España recibirá, a finales de año, tres millones de dosis de vacunas contra el coronavirus. De momento, por eso, aún no hay fecha oficial para la comercialización de la vacuna. Expertos internacionales ponen en duda que pueda estar disponible antes de finalizar el 2021 y sitúan en el primer trimestre del año la finalización de las pruebas. Tres hospitales españoles, de momento, participan en el ensayo clínico de una inyección belga para prevenir la enfermedad.

Moncloa vuelve al plasma

El Gobierno ha vuelto al plasma este martes tras la entrada en vigor de las nuevas medidas de la Comunidad de Madrid para evitar la expansión del coronavirus. La Secretaria de Estado de Comunicación solo ha permitido la entrada de los periodistas de diez medios, sin cámaras, para cubrir presencialmente la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. El resto de comunicadores han tenido que seguir la rueda de prensa de forma telemática a través de un sistema de videoconferencia, dificultando las preguntas a los representantes gubernamentales.

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