Iker Jiménez denuncia que en España no podemos defendernos: «Al parecer, hay que dejarse matar»

Iker Jiménez, desde su cuenta personal de X (antes Twitter) ha denunciado las políticas de nuestro país y la impotencia que tenemos los ciudadanos ante cualquier ataque violento. Poniendo como ejemplos un par de terribles crímenes que han ocurrido últimamente, el presentador de Cuarto Milenio recuerda que, en Ciudad Real han «declarado culpable» a un hombre que ha defendido su casa con «una escopeta». Según el periodista, la solución sería «dejarse matar» ante los que invaden nuestras casas. «Es la putrefacción de todo valor moral», concluye el comunicador. Jiménez se ha referido así a Pepe Lomas, un librero jubilado que sorprendió a un ladrón en su casa en agosto de 2021 y le pegó dos tiros con una escopeta, matándolo en el acto. El anciano ha sido condenado por un delito de homicidio con dolo eventual.

«Triple crimen en una casa de Morata de Tajuña. Triple crimen en una casa de Chiloeches… Y en Ciudad Real declaran culpable a quien con una escopeta defiende su casa. Al parecer hay que dejarse matar. Es la putrefacción de todo valor moral». Este es el tuit que el presentador Iker Jiménez publicó el martes 16 de abril. Con este mensaje, el famoso periodista se quejaba de la resolución de un caso que ha levantado una gran polémica en nuestro país.

Triple crimen en una casa de Morata de Tajuña. Triple crimen en una casa de Chiloeches…
Y en Ciudad Real declaran culpable a quien con una escopeta defiende su casa. Al parecer hay que dejarse matar. Es la putrefacción de todo valor moral.

— Iker Jiménez (@navedelmisterio) April 15, 2024

El caso de Pepe Lomas

José Manuel Lomas Espada sólo era un conocido librero de Ciudad Real hasta la madrugada del 1 de agosto de 2021. Desde se momento se convirtió en Pepe Lomas, el «justiciero» jubilado de 77 años que fue enviado a prisión provisional por matar de dos tiros al ladrón reincidente que aprovechó la oscuridad para entrar a robar en su casa. Pasó diez meses en prisión provisional y ahora, con 80 años, se ha sentado en el banquillo para enfrentarse a una petición de 25 años de cárcel por asesinato, algo que ha pedido la defensa de la familia del ladrón, un ex militar hondureño con antecedentes. Al final, este pasado sábado, el jurado popular ha declarado culpable a Lomas de un delito de homicidio con dolo eventual. Siete de sus nueve miembros votaron a favor de aplicarle al acusado los eximentes de «anomalía» o «alteración psíquica», así como un atenuante por la confesión del delito ante la Policía Nacional. Con ello, la presidenta del tribunal, la magistrada Mónica Céspedes, tendrá que dictar sentencia.

La indignación de Iker

Iker Jiménez vuelve a mostrar su indignación ante la impotencia que vive el ciudadano español ante la violencia y una ley que, en realidad, no protege. Para ello, pone los ejemplos de los triples homicidios de Chiloetes y Morata de Tajuña. No es la primera vez que el presentador de Cuarto Milenio se queja de algo así.

El viernes 9 de febrero una narcolancha arrolló, en el Puerto de Barbate (Cádiz), a una embarcación de la Guardia Civil, asesinando allí mismo a dos agentes y dejando heridos a otros cuatro. Sobre este suceso, Jiménez publicó un vídeo en redes sociales que, enseguida, se hizo viral. En él, el comunicador de Mediaset dijo: «Nos llamaban, desde ciertos periódicos digitales, ‘asustaviejas’ por advertir de que se atacaba con machetes por Madrid y por Barcelona y ese tipo de cosas. Entonces, desgraciadamente, los acontecimientos demuestran que todo tiende, lógicamente, hacia una cuestión: la sensación de impunidad que tiene el delincuente. Yo no digo que el delincuente sea impune en España, digo la sensación que debe tener de que puede actuar con cierta impunidad, sino esto que hemos visto con la narcolancha en Barbate sería increíble con cierto respeto a la autoridad».

Lo de Barbate…y algo más. pic.twitter.com/4Iif0MxQji

— Iker Jiménez (@navedelmisterio) February 11, 2024

Jiménez continuó alegando que: «Nos hemos convertido en una sociedad atomizada después de la pandemia, cuyo cambio es mucho más profundo, creo, que el que imaginábamos. Estamos repletos ahora de imágenes que nos recuerdan a la China más despiadada, a esa China donde atropellaban a alguien, nadie se paraba, a esa China donde apalizaban a alguien y nadie miraba. Bueno, pues eso ya está en nuestra sociedad, tenemos impunidad o sensación, mejor dicho, de impunidad de algunos delincuentes, sensación de que esto es jauja para algunos delincuentes, lo sé o no, la sensación que algunos tienen y lo sé, de buena tinta. Se ve que no va a pasar más o menos nada: Es más, que va a haber una parte de la sociedad que poco menos lo va a ver normal».