Esta ruta senderista guarda el secreto mejor guardado del Imperio Romano: su mayor mina de oro
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El secreto mejor guardado del Imperio Romano se encuentra en España. Las minas de oro sobre las que se asentaban su poder se sitúan en El Bierzo, al noroeste de los Montes Aquilanos y al lado del Valle del Río Sil en Castilla y León.
Las Médulas es el resultado de las explotaciones auríferas romanas. Están consideradas la mayor mina de oro a cielo abierto de todo el Imperio Romano. El trabajo que realizaron alteró el medio natural de la zona. El resultado es un paisaje de arenas rojizas que está cubierto principalmente por castaños y robles. Este entorno fue declarado Bien de Interés Cultural en 1996 y un año más tarde la UNESCO lo declaró Patrimonio de la Humanidad. Además, en 2022 se le galardonó con el título de «Monumento Natural» y en 2010 como «Espacio Natural». España cuenta son senderos majestuosos que merecen la pena realizar.
Ruta por Las Médulas, la joya del Imperio Romano
En este paraje hay una red de trayectos señalizados. Esta ruta de senderismo circular tiene una distancia de unos 9 kilómetros y una duración estimada de 3 horas. La dificultad es media. Para iniciar el itinerario tienes que dirigirte hasta el pueblo de Las Médulas. En la entrada, cerca del Aula Arqueológica, hay un amplio aparcamiento en el que puedes estacionar tu vehículo. Luego, debes ir hasta el Centro de Visitantes.
El sendero comienza en él y en la primera bifurcación atravesarás una pequeña valla de madera que se sitúa a la derecha. Sigues caminando por una pista señalizada como «Senda de las Valiñas» hasta cruzar una cancela de madera y tomar el desvío hacia la «Senda de Reirigo».
En el primer tramo la pendiente se hace dura y estará acompañada por castaños. Conforme vayas ganando altura, el robledal tomará el relevo. Arriba, este camino conecta con la «Senda Perimetral». Tendrás que girar a la derecha y seguir hasta el Mirador de Pedrices en el que disfrutarás de una primera panorámica de Las Médulas, su población y el lado Sumido. Junto al lago se encuentran las lagunas Larga, Negra y Pinzáis.
Explorando el sendero de Las Médulas
Desde el Mirador de Pedrices tendrás que volver hasta el punto donde tomaste el desvío y coger la «Senda Perimetral». En escasos metros te encontrarás con un cartel que te indica el «Alto de Reirigo» y un mirador desde el que puedes ver este pico a 979 metros. A lo largo de la ruta verás las crestas de Las Médulas de Yeres conocidas como «Las Medulillas».
El sendero irá descendiendo cerca de la pared rojiza. Durante este trayecto podrás ver cuevas y superarás unos pequeños escalones con un fuerte desnivel hasta ir dejando atrás las crestas y acercarte al Pico de Placias a unos 1.022 metros de altitud. Luego, volverás a la «Senda Perimetral» y visitarás el Mirador de Orellán, uno de los puntos más conocidos de Las Médulas. Tras disfrutar del paisaje debes volver hasta la «Senda de las Valiñas» para retomar el camino de vuelta hasta el Centro de Visitantes, donde terminará la ruta de Las Médulas.