CASO LUIS LORENZO

Luis Lorenzo pide el archivo de su causa por homicidio: «Han usado chismes como si fueran pruebas»

El último informe forense concluye que el actor Luis Lorenzo y su pareja no envenenaron a la tía Isabel

El informe definitivo del caso Luis Lorenzo: la tía Isabel no fue envenenada ni sufrió malos tratos

Luis Lorenzo: «De la noche a la mañana, sin respetar la presunción de inocencia, nos han convertido en asesinos»

La Guardia Civil no encuentra en casa del actor Luis Lorenzo pruebas que sustenten el envenenamiento

Luis Lorenzo
Ángel Moya

El actor Luis Lorenzo pide el archivo de su causa por el homicidio de la tía Isabel: «Han usado chismes como si fueran pruebas». La petición de que se retiren todos los cargos contra el actor y su mujer, acusados del homicidio de la tía Isabel, llega sólo seis días después del informe forense del juzgado que rechaza la teoría del envenenamiento y les exculpa de la muerte de la anciana.

La petición del actor al Juzgado de Instrucción número 9 de Arganda del Rey (Madrid) tiene fecha de 29 de junio de 2023 y se apoya de forma fundamental en el informe de los forenses de fecha 23 de junio de 2023, «que concluye de manera clara, precisa y taxativa que no existen datos objetivos de intoxicación aguda por cadmio o manganeso». De esta forma, la tesis de la existencia de un delito de homicidio cometido por envenenamiento queda totalmente descartada, según la defensa del actor en este escrito al que ha tenido acceso OKDIARIO.

En su petición de sobreseimiento, la defensa del actor Luis Lorenzo se apoya en dos afirmaciones más que incluyen los forenses imparciales del juzgado en este informe definitivo. Los especialistas tampoco ven indicios de que la anciana fuera maltratada, ni de que se le hubiera dado medicamentos de forma descontrolada, como afirmaba la Guardia Civil en su investigación como hipótesis alternativa al envenenamiento.

Es más, el propio Luis Lorenzo hace hincapié en que cuando la anciana llegó a Madrid procedente de Asturias ya presentaba numerosas patologías que fueron tratadas convenientemente. Así lo refleja su escrito de petición de archivo: «Existen datos objetivos que reflejan que hubo un buen seguimiento facultativo de esas patologías, así como un buen seguimiento de las pautas farmacológicas».

«Por lo tanto, no hay ninguna prueba médica o científica que sostenga la existencia de una situación de posible abandono o desatención. Todas las medicaciones se administraron conforme a las prescripciones médicas y las dosis terapéuticas recomendadas. No existe ningún dato objetivo que acredite ni siquiera indiciariamente la existencia de un posible maltrato», remarcan en este último escrito ante el juez que podría desembocar en el carpetazo de la causa contra el actor y su pareja.

Duras críticas

Tras apuntalar los argumentos científicos que de momento dan la razón a Luis Lorenzo y su pareja, el escrito de petición de archivo critica con dureza los otros indicios por los que siguen acusados: «Frente a la rotundidad de las pruebas objetivas, los denunciantes han pretendido mantener sus acusaciones en los testimonios subjetivos y contradictorios de distintos testigos. De poco o nada sirven las pruebas testificales frente la evidencia científica».

Luis Lorenzo se muestra convencido, y su escrito así lo refleja, en que lo único que mantiene la acusación por homicidio en su contra son el conflicto con la familia de su pareja por la herencia familiar y las malas relaciones con sus vecinos. «Se ha intentado elevar el chisme y el chascarrillo a la categoría de prueba, hasta tal punto de que una testigo calificó de ‘víbora’ a mi clienta, bajo el peregrino argumento de que le cayó mal desde que abrió la puerta», recuerda el abogado de Luis Lorenzo y Arancha Palomino en su escrito.

Aún más, el letrado dibuja a los testigos contrarios a Luis Lorenzo de esta forma: «Un desfile de tíos y primos enfrentados, ex parejas dolidas, vecinos con ansias de protagonismo, cuidadoras con conflictos laborales y personajes varios que antes de declarar en el juzgado lo habían hecho en la televisión». Todo esto, señala, no puede convertirse en justificación del mantenimiento de la presente instrucción.

Luis Lorenzo y Arancha Palomino se consideran víctimas de una situación de escarnio público en la que su vida familiar y su prestigio social han quedado destrozados. Su abogado incide en ello: «Especialmente han sufrido los hijos de mis defendidos quienes, carentes de toda responsabilidad, se han visto abocados de manera injusta e injustificada a sufrir junto con sus padres la maledicencia, teniendo que llegar a cambiar de colegio y de rutinas de vida. No menor está siendo el daño económico, pues sus ahorros se encuentran consignados en el juzgado y las posibilidades laborales truncadas, viviendo del poco dinero que se les ha entregado y de las ayudas que buenamente han podido conseguir».

Para Luis Lorenzo, los testigos no pueden aportar nada a la investigación, y lo único que han conseguido es mantener y acrecentar el sufrimiento suyo y de su familia, así lo plasma en el escrito al juez.

En consecuencia, la defensa de Luis Lorenzo, en manos del letrado Francisco Pérez Platas, ha solicitado el archivo de la acusación que desde hace más de un año pesa sobre la pareja.

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