PARRICIDIO EN MADRID

Ingresa en un psiquiátrico el joven que ha matado a su madre de 8 puñaladas esta madrugada en Daganzo

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Ángel Moya

Lucas, el joven de 24 años que esta madrugada ha matado de ocho puñaladas a su madre en el municipio madrileño de Daganzo, ha ingresado en el área psiquiátrica del Hospital Gregorio Marañón de Madrid. La Guardia Civil ha detenido al parricida que se había atrincherado en el baño de su domicilio tras atacar con un arma blanca a su familia, hiriendo de gravedad a su padre y causando la muerte de su madre de 56 años. El joven estaba en tratamiento psiquiátrico y contaba con antecedentes policiales por otros hechos violentos.

La Policía Local de Daganzo fue la primera en acudir de emergencia al domicilio de la familia en la calle Gallardo Español, pasada la 1:30 de esta madrugada. Los gritos desgarradores del marido de la víctima que pedía auxilio desde el balcón alertaron a una patrulla que pasaba por la zona. Minutos después la Guardia Civil subía las escaleras de la vivienda y encontraba en el dormitorio el cadáver de Mariví de 56 años, con al menos ocho puñaladas en su cuerpo. Su marido, Lorenzo, también presentaba heridas de arma blanca.

El presunto autor del parricidio, Lucas, de 24 años se había encerrado en el baño tras el ataque mortal, aunque la Guardia Civil consiguió persuadirle de que se entregara y le detuvo en el mimo lugar del crimen. Ahora, Lucas, se halla ingresado en el área psiquiátrica del Hospital Gregorio Marañón bajo custodia de los guardias. Serán los médicos quienes determinen el estado mental del parricida.

No era el primer hecho violento que había protagonizado el joven en su localidad. Los vecinos de Daganzo confirman que en varias ocasiones había arremetido con violencia contra los vehículos y las propiedades de otros. Fuentes del caso confirman que Lucas, estaba sometido a tratamiento psiquiátrico. OKDIARIO ha podido confirmar que el presunto parricida cuenta con antecedentes policiales previos al crimen de esta madrugada.

Ahora, los especialistas de criminalística de la Guardia Civil se encuentran inspeccionando la vivienda unifamiliar en la que han ocurrido los hechos. Los investigadores parten de dos. hipótesis que pueden justificar el comportamiento del agresor, un brote psicótico relacionado con la enfermedad mental que padece o la sospecha de que el agresor haya ingerido algún tipo de sustancia que hubiera alterado aún más su estado psíquico en las últimas horas. Para ello, los guardias esperan tomar declaración en las próximas horas al marido de la víctima y padre del agresor, una vez que reciba los cuidados médicos correspondientes.

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