Juicio en Barcelona

Las imágenes de la escena del crimen que serán decisivas en el juicio por asesinato de Janet Jumillas

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El vídeo del registro de la vivienda de Aitor, escena del asesinato de Janet Jumillas, y la grabación donde se ve al mismo arrojando a la basura las pruebas del crimen, son las imágenes que resultarán determinantes en el juicio que arranca el viernes 9 de diciembre en la Audiencia Provincial de Barcelona.

En la vista, la fiscal pedirá 19 años de cárcel para el presunto autor de los hechos, Aitor G. Según el relato de los hechos de la Fiscalía, la mañana del 13 de marzo de 2019 Janet Jumillas acudió al domicilio del acusado para saldar una deuda, cuando este le atacó de una forma brutal «con una o varias armas blancas» y «con la intención de acabar con su vida o sabiendo las altas probabilidades que había de causar su muerte.

Todo sucedió en la vivienda en Viladecans del acusado, allí Aitor, esposado e interrogado por los Mossos d’Esquadra, intenta explicar por qué ha pintado recientemente las paredes de la casa. Fue el 7 de mayo de 2019 y los Mossos le acababan de detener tras grabarle cuando tiraba a un contenedor de basura varios mochos empapados en sangre de Janet y restos de las gafas de la víctima. Todavía no se había encontrado el cadáver de Janet Jumillas.

En las imágenes, los especialistas de criminalística buscan con luz forense en cada rincón de la casa, empezando por el techo y las paredes donde consiguen hallar gotas de sangre. Los policías, que declararán a lo largo del juicio, recortan trozos del césped artificial de la terraza y muestras de la tela que servía de toldo en el ático. También falta la cortina de la ducha y dos cuchillos de la cocina. Aitor lo niega todo y tras más de 40 horas de registro el juez le envió a prisión provisional.  Dos semanas después hallaron el cuerpo de Janet cosido a puñaladas y enterrado en un descampado próximo a la vivienda del sospechoso.

Aitor nunca ha confesado el crimen. Permaneció callado durante los dos años posteriores a su detención, y en 2021 declaró para culpar a dos desconocidos del crimen. En un relato rocambolesco, Aitor contó que Janet se presentó en su casa con un hombre y otra mujer que le amenazaron si no les daba dinero. Según el acusado, los tres le dejaron bajar al coche a ver si encontraba más dinero y a su regreso se encontró muerta a Janet en el salón. No denunció, dijo, porque tenía miedo. Lo que se desconoce es si Aitor mantendrá esta versión inverosímil durante este juicio que arranca en cuestión de horas.

La fiscal sí que mantiene su petición de 19 años de cárcel para Aitor y además relata en su escrito que éste  atacó a Janet de forma «sorpresiva e inopinada, armado y por la espalda, de manera que la víctima no pudo prever el ataque ni oponer defensa eficaz alguna».

Para la fiscal, y para la el letrado de la acusación, Jorge Albertini, que representa a la familia de la víctima, los hechos reúnen todos los ingredientes de un asesinato con alevosía y solicitan una pena de 19 años de cárcel para el acusado. Igualmente, exigen una indemnización por daños morales para los familiares de la víctima, que la fiscalía calcula en 400.00 euros para cada uno de sus dos hijos menores de edad, 200.000 para cada uno de los padres de Janet, y 80.000 para cada uno de los hermanos de la víctima.

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