Crimen de Meco: la Audiencia rechaza el recurso de los padres de Miriam para reabrir su asesinato
La Audiencia Provincial de Madrid ha rechazado reabrir el caso sobre el asesinato de Miriam Vallejo, asesinada en enero de 2019 en un descampado de la localidad madrileña de Meco de 89 puñaladas por un desconocido. Los padres de la joven han seguido una incansable lucha desde entonces para intentar que el novio de una amiga, Sergio S.M., fuese juzgado por el crimen y se investigase la posible participación de Alberto B. L., que se declaró culpable del mismo, aunque los investigadores nunca creyeron esta auto inculpación. Un auto dictado el 25 de julio los jueces desestiman el intento final de los padres de Miriam para iniciar el proceso de juicio oral contra los acusados.
El auto estima que los indicios contra los acusados no son suficientemente fuertes para que sean acusados en un juicio de asesinato o de homicidio. En el caso de Sergio, el tribunal estima que los indicios criminológicos en su contra como «el perfil genético de ambos localizados en la chaqueta que ella vestía el día de su muerte» corresponderían a que «ambos compartían la misma vivienda, por lo que la mezcla de los perfiles genéticos en las ropas puede tener explicaciones distintas», además la ex pareja de Sergio, Celia, declaró que los tres «mezclaban la ropa a la hora de lavar y a menudo compartía ropa con la finada, ya que los tres vivían en el mismo domicilio y ellas tenían la misma talla».
Tampoco la triangulación del teléfono de Sergio terminó de apuntalar las pruebas en su contra porque, según la Audiencia, «el lugar en el que falleció Miriam estaba cercano al domicilio que compartía con Sergio, por lo que no sería extraño, ni ocasional, que el teléfono móvil del mismo apareciera conectado a dicha zona de la antena repetidora, manteniendo el investigado que cuando sucedieron los hechos, el mismo permanecía en su domicilio».
Para exonerar a los investigados el tribunal también se refiere a la declaración de una testigo «quien refirió que escuchó a una mujer gritar: «Soltadme, dejadme» por lo que debemos deducir que los partícipes en su muerte debieron ser más de una persona». Tampoco el médico forense supo determinar el número de atacantes de Miriam, «ni cual fue el iter secuencial de la agresión sufrida por Miriam» y «tampoco ha sido localizada el arma blanca que fue utilizada para su muerte». El tribunal también descarta que los mensajes de whatsapp enviados por la ex pareja de Sergio al hermano del investigado «tampoco hace prueba plena de la participación directa de aquel en los hechos», añaden.
Respecto al otro investigado, Alberto B.L., «debemos de señalar que el único motivo por el cual fue objeto de investigación, es por el mero hecho de que por él mismo manifestó a terceras personas que fue él quien había dado muerte a Miriam». El ADN de esta persona dio negativo con las muestras tomadas al cadáver de la joven.
El 16 de enero de 2019, Miriam Vallejo, ‘Miri’, como la conocían sus amigos, salía a pasear a sus perros y a los de su compañera de piso. La joven tenía 25 años y compartía vivienda en la localidad madrileña de Meco con Celia, su mejor amiga, y Sergio, el novio de ésta. Miri estaba en una zona entre el municipio de Meco y el de Villanueva de la Torre (Guadalajara) cuando alguien la atacó y le asestó 89 puñaladas en el tórax, en el cuello, en los brazos y en el cráneo, un crimen que corre el riesgo de quedar sin resolver.
Temas:
- Asesinatos
- suceso