Albert Cavallé, el ‘estafador del amor’ condenado, se hacía pasar por hijo del doctor Jorge Planas
Albert Cavallé Ortín, más conocido como el ‘estafador del amor’, fue condenado el pasado miércoles a dos años y tres meses de cárcel tras llegar a un acuerdo con la Fiscalía en la causa donde seis mujeres le acusaban de haberlas estafado hasta 70.000 euros con falsas promesas de amor. Cavallé conquistaba a estas mujeres a través de las redes sociales, les decía que era inversor, abogado e incluso un cirujano plástico de reconocido prestigio en Madrid y Barcelona. En concreto decía ser hijo de Jorge Planas, de la conocida Clínica Planas. Por este motivo el doctor Planas ha accedido explicar a OKDIARIO que «quede claro que no tengo nada que ver con este señor ni nadie de mi familia y que si algo así vuelve a ocurrir que se sepa que no es nada de nuestra familia».
Albert Cavallé decía que se llamaba Álvaro, Pablo Angosto e incluso Albert Planas y que era el heredero de la Clínica Planas. En su perfiles de las redes Tinder o Badoo también era abogado, empresario o inversor en bolsa.
‘El estafador del amor’ se enfrentaba esta semana a 10 años de cárcel por robar 70.000 euros a seis mujeres. Albert Cavallé se sentó en el banquillo acusado, en esta ocasión, de engañar y robar a media docena de mujeres que conoció a través de las redes sociales. Según el fiscal, Cavallé siempre se hacía pasar por inversor, millonario, abogado o cirujano, para entablar una relación sentimental y pedirles dinero con excusas muy elaboradas. También les robaba las tarjetas de crédito que usaba para costearse noches en los hoteles más caros de Barcelona o saciar su faceta de comprador compulsivo.
A estas seis mujeres las conoció entre los años 2015 y 2017. A la primera de las víctimas le dijo que era abogado e hijo de Jorge Planas, el prestigioso cirujano plástico. Aprovechándose de que la víctima era extranjera y estaba en situación irregular, el estafador «le hizo creer que solucionaría sus problemas». Primero le pidió 1.000 euros para abrir una cuenta bancaria, asegurándole que su madre era directora de una oficina de La Caixa. Poco después, le pidió 2.000 euros más en efectivo para conseguirle un NIE. Cuando la víctima le dio el dinero, Cavallé se lo quedó, desapareció y la bloqueó en WhatsApp.
Dos años después, en mayo de 2017, ‘El estafador del amor’ volvió a echar sus redes en la red social Badoo. Ahora se presentaba de nuevo como cirujano que debido a su trabajo y a sus cuentas en Panamá, viajaba con frecuencia a ese país centroamericano, mostrando a la víctima reservas de vuelo en avión privado. La excusa era que por el escándalo de ‘los papeles de Panamá’ tenía sus cuentas bloqueadas y le pidió ayuda a la mujer. La víctima llegó a hacerle ingresos a Cavallé por más de 51.000 euros. En una de sus estancias en casa de la mujer, Cavallé aprovechó presuntamente para robar la tarjeta de crédito de la madre de la víctima y gastarse más de 3.500 euros en compras. Cuando fue descubierto, Cavallé desapareció del mapa.
También en mayo de 2017 el acusado, que ahora decía llamarse Albert Cavallé Planas y ser hijo de una familia de millonarios, inició relación con una nueva víctima. La excusa de Cavallé era que tenía nacionalidad andorrana y una gran cantidad de billetes de 500 euros pero no podía cambiarlos. Le pidió a la víctima mil euros para «ir tirando». Luego aseguró habérselos devuelto mostrándole un ‘pantallazo’ de una transferencia que nunca se hizo.
Cavallé en realidad está ya condenado por estafa al menos en diez ocasiones, cuatro de ellas con sentencias firmes que suman 3 años y nueve meses de prisión, es un «embaucador» de mujeres, de las que «se aprovecha» para «obtener beneficios económicos». Tanto la acusación como el ministerio público pedían para él 9 años y diez meses de prisión, la pena más alta hasta ahora, por un delito continuado de estafa, otro de hurto y dos delitos de obstrucción a la justicia. Pero al llegar a un acuerdo con la Fiscalía y devolver el dinero quizás eluda de nuevo la prisión.
El doctor Planas se enteró de la existencia de un estafador que usaba su identidad y su apellido en el año 2018 cuando la Policía acudió a preguntarle y «podía ser yo como mi hijo, pero él era muy joven entonces y no es médico, claro, entonces solo quedaba yo y evidentemente yo no era». Ahora el doctor explica a OKDIARIO que «estoy satisfecho porque se ha hecho justicia» y añade que «quiero contarlo para que a otras personas no les vuelva a pasar».