El presunto asesino de Ciudad Lineal culpa a la víctima: “Yo no fui, la matarían en un ajuste de cuentas»

Nadie esperaba que hablara, pero Antonio Leal ha roto su silencio para declararse inocente y de paso ensuciar la memoria de su presunta víctima. Ha sido durante la comparecencia prevista por la Ley del Jurado para comunicarle los delitos de los que se le acusan. Sentado en el banquillo ha escuchado como fiscalía le acusa del asesinato de Esther Escobar de un tiro en la sien y de tenencia ilícita de armas. Lo mismo que la acusación particular que representa a la familia de la víctima. Su defensa pide la absolución.
Tras escuchar a todas las partes Antonio, que hasta el momento no había dado demasiadas explicaciones del asesinato de Esther, ha pedido declarar sorprendiendo a los presentes. Antonio se ha declarado inocente de la acusación de asesinato y ha detallado que relación le unía a la víctima con la que según él, estaba ultimando preparativos de boda.
Antonio ha relatado que Esther ejercía la prostitución y era cocainómana, y él la estaba ayudando a dejarlo, atribuyendo el asesinato de Esther a motivos de ajustes de cuentas por deudas de droga. Niega que amenazara a Esther si no se casaba con él, y menos con una pistola en la sien como han denunciado varios familiares de la víctima.
Más centrado en los detalles del crimen, Antonio admite que estuvo en el lugar del crimen unas horas antes pero niega que sea él la persona que grabaron las cámaras huyendo del lugar. Insiste en que se enteró del crimen por los medios de comunicación y que no se fugó a Levante sino que “salí de Madrid para que me diera el aire” porque estaba agobiado por la noticia. Antonio también niega que confesara el asesinato de Esther cuando días después se entregó a la policía local en Albacete. Los policías que le detuvieron dicen lo contrario “el individuo se nos acercó con las manos en alto y nos dijo soy el que buscan en Madrid por el asesinato de Esther Escobar, la maté porque se acostaba con otros”. Entonces se había cambiado de ropa, pero Antonio no recuerda de donde sacó la ropa. La ropa que llevaba puesta el día del crimen tenía rastros de pólvora, pero según Antonio se contaminaría en el maletero del coche por el contacto con dos pistolas que le intervinieron en el momento de su detención. ¿Que por qué llevaba dos pistolas en el coche? , según Antonio porque a su madre con la que convive le da miedo verlas en casa y decidió guardarlas en el hueco de la rueda de repuesto de su vehículo. Hasta ahí el relato ante el juez del presunto asesino de Esther Escobar. Antonio, también ha declarado que está curado de sus problemas siquiátricos apartando así la posibilidad de usarlos como argumento para que bajen la pena si es condenado por el crimen.
En realidad su defensa va por otros derroteros. Descartado de momento el argumento de una posible dolencia siquiátrica del asesino, su abogado sí ha pedido que le sometan a un test de drogas y que se compruebe si las cámaras que grabaron a Antonio en el lugar del crimen tienen autorización para funcionar. La acusación particular a cargo del letrado Juan Manuel Medina le acusa de asesinato con alevosía y pide que declaren los testigos que vieron al presunto asesino en la zona de la escena del crimen.