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Dolor cervical: cómo prevenirlo y tipos

Dolor cervical: cómo prevenirlo y tipos
Dolor cervical: cómo prevenirlo y tipos

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Los dolores corporales, algunos sobre todo, son un mal de esta época, en la que pasamos demasiado tiempo sin movernos… y demasiado tiempo recostando el peso sobre una zona en particular. Justamente, porque sabemos que es probable que lo estés padeciendo, en las siguientes líneas queremos enseñarte cómo prevenir el dolor cervical, y a qué puede deberse su aparición.

Podemos definir el dolor cervical como aquel que se ubica en la parte posterior del cuerpo y/o parte alta de la espalda, que se vuelve insoportable a medida que pasan las horas y los días, y que normalmente describimos sólo como “dolor de cuello”.

El problema es que en el cuello conviven distintas estructuras, y el dolor cervical refiere únicamente a una de ellas. Se trata de esos casos en los que el sufrimiento viene directamente desde las vértebras, discos intervertebrales, y sus músculos, articulaciones o nervios.

En más de una ocasión el dolor cervical está acompañado, además, de cierta rigidez en la misma región, imposibilitándonos mover la cabeza naturalmente, y agudizándose el dolor al hacerlo.

En líneas generales, las causas del dolor cervical pueden ser variadas, pero podemos entender su aparición por una hernia discal, artritis, esguinces y hasta infecciones, lo que suele dar como resultado un dolor crónico, que requiere de una consulta urgente con un profesional.

No obstante, por nuestro estilo de vida, el dolor cervical puede ser el síntoma último de una mala postura sostenida durante semanas, meses e incluso años, y que vamos a tener que revertir, para prevenir así que empeore, y pueda derivar en los diagnósticos antes mencionados.

Por ejemplo, si trabajas con ordenadores, tienes que encontrar una posición en la que mantengas la espalda recta, mires la pantalla de frente, sin inclinar el cuello hacia abajo o hacia arriba, manteniendo siempre la espalda pegada a la silla, sin separarla de ella.

Lo mismo pasa con las personas que por su profesión conducen vehículos durante buena parte de la jornada, a las cuales se les recomienda regular el respaldo del asiento para que esté entre 90º y 110º grados como máximo, consiguiendo así la mejor posición para pasar el día.

Si tu problema tiene que ver con el uso del teléfono, sobre todo para recibir audios o llamadas, tienes que evitar sostenerlo presionando tu hombro contra la cabeza, o lo pagarás al cabo de un rato.

Como puedes ver, el dolor cervical tiende a surgir producto de malos hábitos, por lo que hay que detenerse en ellos, y poner remedio antes de que el dolor se vuelva constante.

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