Cómo comer avena para adelgazar
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Seguro que eres consciente de que la popularidad de que la avena, una especie de cereal ha ido en aumento durante los últimos años, y es que a raíz de la demonización de los productos ultraprocesados, la sociedad ha empezado a buscar alternativas más sanas. Así te contamos cómo comer avena para adelgazar.
Por ejemplo, se puede tomar en el desayuno o en el almuerzo con el fin de permitir dejar de lado los productos azucarados. Y es por ello que la avena ha empezado a tener un papel tan relevante en la alimentación de muchas personas.
Por ese motivo, y en caso que te interese saber lo que la avena puede hacer por ti si empiezas a introducirla en tu dieta habitual, a continuación te explicamos todo lo que necesitas saber sobre este cereal, incluyendo todas sus cualidades, los beneficios que puede aportarle a tu salud y las mejores maneras de consumirla para que cuidarte, sea un placer.
¿Qué sabes exactamente sobre la avena?
Aunque al producto final que consumimos con este nombre lo conocemos como un tipo de cereal que suele contener gluten, lo cierto es que la avena en sí hace referencia a un genero de plantas que se utilizan como alimento pero también como forraje.
Aunque como hemos dicho ahora está muy de moda, en épocas pasadas el trigo y la cebada tenían un reconocimiento mucho mayor al de la avena, pues esta se consideraba solo una mala hierba, aunque se cultivaba en importantes cantidades sobre todo en la zona de la Asia Central.
Precisamente pasó de ser una mala hierba a un alimento de calidad, cuando la sociedad empezó a darse cuenta de su interesante valor nutricional, y es que la avena es rica en grasas, proteínas de alto valor biológico, y contiene un gran número de vitaminas y minerales, como por ejemplo magnesio, manganeso, cobre, hierro, zinc y vitamina B1, así como pequeñas dosis de calcio, ácido fólico y otras vitaminas del grupo B.
Y lo mejor es que en poca avena ya podemos obtener cantidades suficientes de todas estas propiedades ¡y sin consumir demasiadas calorías!
Si es un cereal distinguido es porque junto a los carbohidratos y la fibra aporta más proteína, minerales y grasa (y es que es el cereal con mayor proporción de grasa vegetal con un 54 % de grasas no saturadas y un 46 % de ácido linoleico) que muchos otros cereales.
Todo lo que la avena puede hacer por ti
Este valor nutricional no se queda solo en los números y es que gracias a todos los componentes mencionados, esta planta consigue aportar numerosos beneficios a nuestra salud, ya que además de todo lo comentado, también posee varias sustancias que la hacen única, como los betaglucanos y unos antioxidantes llamados avenantramidas.
Entre sus propiedades, encontramos que es rica en antioxidantes (concretamente en avenantramidas, unos polifenoles que se encuentran casi exclusivamente en la avena y que son especialmente beneficiosos para el sistema cardiovascular y para reducir la irritación de la piel); y que gracias a sus betaglucanos regula los niveles de azúcar, alimenta las bacterias buenas del intestino y nos ayuda a reducir el colesterol.
Esto último también gracias a sus avenantramidas, que contribuyen a evitar la oxidación del colesterol, especialmente si se consume la avena acompañada de alimentos ricos en vitamina C. Todo ello hace que la avena sea ideal para incluir en la dieta a fin de prevenir trastornos cardiovasculares.
Si sufres trastornos en el sistema respiratorio como por ejemplo el asma o estás enfocado en perder peso, esta planta también se convertirá en tu mejor aliada porque además de prevenir la aparición del asma gracias a su fibra, también nos ayuda a mantener la línea.
Esto es porque la avena no dispara el azúcar en sangre y esto puede resultar de ayuda en este sentido, pues evita los altibajos de glucosa ¡además de resultar saciante y mejorar el estreñimiento!
Disfrútala de tu forma favorita
Como decíamos al inicio, la forma más popular de consumir avena actualmente es incorporando unos cuantos copos a nuestro desayuno, que puede ser perfectamente un bol de yogur con frutas, por ejemplo.
Pero si estás decidida a probar opciones más originales debes saber que, por suerte, se trata de un alimento de lo más versátil y que por ello es realmente fácil combinarla en diversos platos para que incorporarla a tu dieta en el día a día no resulte para nada problemático.
Si eres una amante de las cremas de verduras, te gustará saber que en forma de nata o crema la podrás incluir en alguna digestiva vichyssoise con avena que seguro que te queda riquísima, pero si lo que te apetece es tenerla a mano como una bebida a la que poder recurrir durante todo el día, la leche de avena seguro que también conseguirá conquistarte.
¿Te consideras amante de lo dulce? Entonces prueba con un crumble de manzana y arándanos o elabora tus propias tortitas de avena, y es que con esta planta ¡incluso puedes preparar tu propia granola en casa!
Así pues ¿te animas a introducir la avena en tu dieta habitual para beneficiarte por fin de todas sus cualidades?
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