Ana Ibáñez: «El entrenamiento cerebral permite que nuestro sistema nervioso se regule mejor»
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La Neurociencia es una disciplina que estudia el funcionamiento del cerebro y su relación con la mente, el comportamiento y las emociones. ¿Qué sabemos realmente sobre nuestro órgano más complejo y fascinante? ¿Cómo podemos sorprenderlo y estimularlo para mejorar nuestra salud y bienestar?
Para resolver estas preguntas contamos con la opinión experta de una de las neurocientíficas más prestigiosas de España, Ana Ibáñez. La autora del libro ‘Sorprende a tu mente’ (Planeta) es doctora en Psicología, profesora de investigación del CSIC y directora del Instituto de Neurociencia Cognitiva y Traslacional.
En esta entrevista, Ana Ibáñez nos habla de los avances más recientes de la Neurociencia, de los mitos y las verdades sobre el cerebro, de las estrategias para mantenerlo joven y activo, y de los desafíos que plantea el futuro de la inteligencia artificial.
PREGUNTA.- ¿Qué le motivó a escribir este libro y a compartir sus conocimientos sobre el entrenamiento cerebral?
RESPUESTA.- En mis centros Mindstudio de Madrid y Barcelona entreno cerebralmente con tecnología de neurociencia a muchas personas y, de forma simultánea, les entrego pautas concretas con las que pueden cambiar patrones cerebrales para superar la ansiedad, el estrés negativo, ganar en energía o tener mayor comodidad emocional. Este libro recoge muchas de esas pautas, de manera sencilla, para que todo aquel que lo lea tenga herramientas de fácil acceso para mejorar su vida, en el día a día, siempre basado en la neurociencia. Creo que esto es algo que se necesitaba, acercar la neurociencia y el funcionamiento del cerebro para que seamos mucho más partícipes de lo que le ocurre, esa es mi gran motivación.
P.- ¿Cómo ha influido su conocimiento sobre neurociencia en su vida diaria?
R.- Ha influido a todos los niveles. En mi misma puedo apreciar un cambio notable desde que me introduje en el mundo de la neurociencia y el entrenamiento cerebral. En mi caso, he ganado muchísimo en serenidad interna, concentración, creatividad, a la hora de resolver problemas, seguridad, calidad de sueño y comodidad emocional. Cuando miro atrás veo que mi vida es ahora mucho más agradable y, que no estando exenta de muchos retos, la manera que tengo de enfrentarlos es mucho más fluida, serena y optimista. Si lo tuviera que resumir diría que disfruto mucho más.
P.- En su libro nos enseña a entrenar nuestro cerebro ¿realmente a través del entrenamiento mental podemos transformar nuestra vida?
R.- Sí, sin ninguna duda. Yo soy testigo de ello todos los días con las personas que entreno, desde niños a adultos y a profesionales de todo tipo. Cuando logramos que nuestro cerebro conecte las áreas más sofisticadas que se encuentran en nuestro córtex prefrontal y logramos que disminuya la actividad de nuestra amigdala, nuestras conexiones neuronales mejoran. Disminuye el nivel de cortisol, nuestras frecuencias cerebrales se optimizan y nuestro cerebro se activa mejor porque riega mejor todas sus áreas.
P.- ¿Qué beneficios tiene el entrenamiento cerebral para nuestra salud física y mental?
R.- En primer lugar, reduce mucho nuestra alerta cerebral, lo que se traduce de manera directa en una reducción del cortisol y regulación de nuestro sistema nervioso. Esto tiene consecuencias directas en nuestra calidad de sueño, en el funcionamiento de nuestro corazón, en nuestra comodidad emocional, en nuestras capacidades cognitivas, en enfrentar el estrés de una manera sana, y en definitiva de sentirnos con mayor equilibrio y capacidad de respuesta ante lo que nos pasa. El entrenamiento cerebral permite que nuestro sistema nervioso se regule mejor y evite la sobrecarga con todo lo que esta sobrecarga conlleva en términos de salud mental y física.
P.- ¿Qué técnicas y tecnologías usa para evaluar y mejorar el rendimiento cerebral de tus clientes?
R.- Utilizamos tecnología de neurociencia para armonizar las frecuencias cerebrales mediante ejercicios concretos que se le pide realizar al cerebro en función de los aspectos que se quieran trabajar. Es una tecnología no invasiva, apta para niños y adultos. Para la detección y posterior tratamiento de TDA y TDAH (trastorno de déficit de atención y trastorno de déficit de atención con hiperactividad) empleamos tecnología de realidad virtual con la que logramos un análisis cualitativo y cuantitativo, muy preciso de los estados de atención.
P.- ¿Qué consejos le daría a alguien que quiere empezar a entrenar su cerebro desde cero?
R.- Sin duda, que haga una sesión de armonización de frecuencias y para conseguir rebajar en primer lugar la tensión y alerta cerebral. En mi experiencia, en cualquier proceso, ya sea de bienestar, para el alto, rendimiento o entrenamientos para estudiantes, estas sesiones de armonización de frecuencias son las que producen mayores resultados. Y a continuación aplicar pautas como las que entrego en el libro.
P.- Hay cierto desconocimiento social sobre el concepto de inteligencia emocional ¿qué es y por qué es importante saber controlarla?
R.- La inteligencia emocional se puede definir como la capacidad de reconocer nuestras propias emociones y las de los demás. Este término se popularizó gracias a Daniel Goleman, aunque el término ya existía antes. Es decir, esta inteligencia es la capacidad para saber qué emoción estamos sintiendo o que siente la persona que tenemos al lado, y esto no es algo innato ni igual para todos. Cuanta más inteligencia emocional tengamos, mayor será la facilidad con la que lograremos percibir nuestras emociones y las de los demás. Esto es importante, porque nos permite conocernos mejor y saber guiarnos dentro de nuestro mundo emocional y también mejorar las relaciones con los demás.
P.- ¿Qué papel juega la alimentación, el sueño y el ejercicio en el funcionamiento óptimo del cerebro?
R.- Estos tres aspectos juegan un papel crucial. La alimentación influye directamente en la salud de nuestro intestino además de dotarnos o no de la energía y nutrientes necesarios y saludables para vivir. Pero es que además el intestino con sus 200 millones de neuronas, dialoga con el cerebro y participa en la regulación de las emociones. Hay una comunicación directa, cerebro e intestino, y es un camino de ida y vuelta, por lo que la alimentación influye directamente sobre nuestro funcionamiento cerebral.
Durante el sueño, tiene lugar en el cerebro un mecanismo de «autolavado» que permite que regeneremos nuestro cerebro y se resetee. Tiene mucha importancia para limpiar las proteínas tóxicas que deterioran la memoria. Dormir bien es fundamental para nuestra salud cerebral. Y por último el ejercicio físico influye directamente nuestra plasticidad cerebral, influye en la formación de caminos neuronales, en la creación de patrones de frecuencias cerebrales, más óptimas y ayuda a nuestro sistema a descargar tensión y eliminar estrés. El ejercicio físico viene acompañado de ráfagas de frecuencias alfa, que son muy saludables para nuestro cerebro.
P.- ¿Qué mitos y falsas creencias existen sobre el cerebro y cómo podemos desmontarlos?
R.- Creo que el principal mito del cerebro es qué es una parte de nuestro organismo, que es tan compleja que no podemos hacer nada por cambiarlo, que estamos desvalidos frente a lo que ocurre ahí dentro. Nada más lejano de la realidad, tenemos tanta capacidad de mejorar un músculo, como tenemos de mejorar nuestro cerebro, solo necesitamos aprovechar nuestra plasticidad cerebral, es decir, la capacidad que tiene nuestro cerebro de transformar sus neuronas y la conexión entre ellas a través de ejercicios específicos. Y la neurociencia nos demuestra que no hay nada más falso que la frase.” yo soy así y no puedo cambiar” en realidad, el verbo correcto no sería poder, sino querer, si quieres cambiar tu funcionamiento cerebral, puedes hacerlo