Gau Beltza, el Halloween vasco: su historia y origen
 
							
El próximo 31 de octubre se celebra Halloween, la noche más terrorífica del año y, al igual que ocurre con otras celebraciones, cada región tiene sus propias tradiciones. En el caso del País Vasco, la Gau Beltza (Noche Negra) es una costumbre ancestral que está resurgiendo en pueblos y ciudades. Antes de que la celebración de Halloween llegara a España, en las zonas rurales del País Vasco ya existía la Gau Beltza, una noche en la que se creía que las almas de los difuntos regresaban al mundo de los vivos.
El origen de esta tradición está estrechamente ligado a los ritos agrícolas. El paso al mes de noviembre simbolizaba el inicio del invierno y el momento de honrar a los antepasados. Las familias encendían velas, tallaban nabos o calabazas y compartían alimentos típicos de la época, como castañas o boniatos. Las llamas de las velas servían, según la creencia popular, para guiar a las almas hasta sus hogares. Aunque el término «Halloween» procede del inglés All Hallows’ Eve (víspera de Todos los Santos), la festividad vasca guarda paralelismos con el antiguo Samhain celta, con el que comparte el simbolismo del cambio de ciclo y la conexión con el mundo espiritual.
Gau Beltza, la celebración de Halloween en el País Vasco
A lo largo del siglo XX, la Gau Beltza fue desapareciendo de forma progresiva debido a la despoblación rural, los cambios sociales y la influencia de nuevas costumbres. Sin embargo, a comienzos del siglo XXI, diferentes entidades culturales empezaron a recuperar esta celebración, como la asociación Euskaltzaleen Topagunea, que impulsó la difusión de la Gau Beltza en colegios, centros culturales y asociaciones locales.
Desde entonces, la Noche Negra ha vuelto a resurgir en pueblos como Ondarroa, Lekeitio, Mutriku o Andoain, donde cada 31 de octubre las calles se llenan de velas, calabazas talladas, disfraces tradicionales y actividades comunitarias. Los principales elementos de la Gau Beltza son los siguientes:
- Las calabazas talladas son uno de los símbolos más destacados. En su interior se colocan velas, que iluminan la oscuridad y ahuyentan a los malos espíritus. Antiguamente también se usaban nabos o patatas, los cuales abundaban en los caseríos.
- Otro elemento son las sábanas viejas con las que los niños y jóvenes representaban almas o espíritus errantes. Este disfraz busca como confundir a los malos espíritus, pero también evocar a los difuntos.
En el ámbito gastronómico, el otoño y la Gau Beltza se acompañan de productos de temporada. Las castañas asadas, el boniato y la calabaza horneada son alimentos habituales durante esas fechas. En algunas localidades se preparan dulces caseros o se comparten meriendas comunitarias en torno a la hoguera.
San Sebastián
«La Noche de Animas o Gau Beltza está cobrando fuerza en San Sebastián. Y prueba de ello son las actividades que han organizado en los diferentes barrios para la noche del 31 de octubre; actividades dirigidas principalmente a los niños y niñas. Gau Beltza es un una fiesta para que tanto niños y niñas como jóvenes vivan y compartan nuestra vieja tradición. Bajo la luz de las calabazas y al son de las viejas canciones, la oscuridad y la luz confluirán en las calles de nuestros barrios, construyendo un puente entre el pasado y el presente», detalla el Ayuntamiento de San Sebastián.
Este 31 de octubre, la ciudad volverá a llenarse de misterio y tradición con la celebración de la Gau Beltza en sus distintos barrios. En Aiete, la tarde comenzará con talleres de manualidades, cuentacuentos y la tradicional queimada, acompañada de música y tentempiés. En Altza, el ambiente festivo incluirá decoración de espacios, chocolatada, trikitilaris, gigantes y un recorrido del miedo, que culminará con un suzko zezena y música de DJ. En Añorga, habrá talleres, cuentacuentos, concurso fotográfico y una sesión de baile; mientras que Antigua ofrecerá su clásico akelarre en el frontón y un recorrido terrorífico.
En Egia, los más pequeños disfrutarán de un itinerario de miedo hasta el cementerio y una gran hoguera en la plaza, y Gros vivirá una tarde llena de disfraces, pasacalles, cuentacuentos, chocolatada y batucada. Ibaeta acogerá talleres, música y sorpresas, y en Loiolako Erribera los asistentes podrán presenciar la aparición de las brujas y un recorrido por Mariren kobazuloa. En Martutene, el programa incluirá una ginkana, talleres terroríficos y una fiesta con DJ, mientras que la Parte Vieja celebrará su Gau Beltza con música, pasacalles, romería y conciertos hasta la madrugada.
El trasfondo espiritual de la Gau Beltza está presente en muchos de sus rituales. Las luces que iluminan la noche evocan la idea de transición entre el mundo de los vivos y el de los muertos. En las zonas rurales, las familias solían dejar una vela encendida en la ventana o junto a la puerta del caserío. Lejos de competir con Halloween, esta festividad vasca ofrece una mirada propia sobre el vínculo entre la vida, la muerte y la comunidad.
 
                             
                             
                             
                             
                             
                                         
                                         
                                        