Si los animalistas se enteran en qué estado tiene Marlaska a los perros antidroga lo denuncian ante la ONU
Presume Marlaska de ser un gran amigo de los animales y en su casa siempre ha habido perros, a veces a pares, pero se conoce que una cosa son los canes propios y otra, bien distinta, los perros ajenos, en este caso de la Guardia Civil, que no es que sea una institución -no hay más que tirar de antecedentes- que goce del cariño del ministro de Interior. Tampoco los agentes son muy partidarios de Marlaska, por razones obvias.
Marlaska tiene a los perros antidroga de Jaén en perreras pequeñas, sin bebederos y llenas de moho, vamos que si se enteran los animalistas le ponen una denuncia de inmediato. Las condiciones en la que malviven los perros en el cuartel de la Guardia Civil de Bailén les ha provocado hasta tendinitis por falta de espacio para moverse. Y, por si fuera poco, debido a la humedad todos tienen hongos en las patas y uno de ellos también sufre de artrosis. Hurcan, Ocho, Sonja y Zaida son víctimas del abandono de Interior, que incumple la ley de Protección de los Derechos y el Bienestar de los Animales, que entró en vigor en septiembre de 2023.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), la mayoritaria, ha denunciado que agentes caninos viven «en unas condiciones pésimas, en las peores perreras que han visto» y exige que de una vez por todas se solucione de forma urgente. Y añaden: «Nos consta que los compañeros del Seprona echan el cierre a perreras de cazadores en mejores condiciones que éstas».
Y no que es sea una situación nueva, sino que ya ha sido denunciada de forma interna en el cuartel por varios agentes exigiendo que se construya unas perreras nuevas conforme a la normativa, pero la respuesta de los mandos siempre viene siendo que se le dará solución «el año que viene». Y así «vamos ya camino de tres años» de la primera denuncia, según detalla a OKDIARIO Valentín Blanco, coordinador nacional de cinológico de la AUGC.
La labor de estos perros es buscar sustancias estupefacientes ilegales en control de vuelos en aeropuertos, control de equipaje en puertos, control de mercancías, así como el control de estas sustancias en dispositivos operativos en carreteras, zonas de ocio y registros domiciliarios. A Marlaska le gustan los perros, pero sólo lo que andan por su casa.