Otro pulso que Ayuso le gana a Pedro Sánchez
El Gobierno socialcomunista ha aceptado la propuesta de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, de cerrar Madrid sólo los puentes de Todos los Santos y la Almudena, pese a que en el decreto del estado de alarma se habla de confinamientos perimetrales nunca inferiores a siete días naturales, sin especificar si son consecutivos. De esta forma, la jefa del Gobierno regional, que ha mantenido el pulso al Ejecutivo socialcomunista en defensa de Madrid y los madrileños, doblega al Gobierno, al que su campaña de acoso y derribo de la presidenta le ha salido rana.
Hace unas semanas, Sánchez impuso a Madrid un estado de alarma arbitrario e injusto, toda vez que las medidas de restricción de movimientos por áreas de salud decretadas por el Ejecutivo autonómico estaban dando resultados. Tanto que a día de hoy Madrid presenta unas cifras mejores, en lo relativo a nivel de contagios, que la media de España. Bajan la incidencia acumulada y bajan la s cifras de ingresos hospitalarios -un 30% menos en un mes-, lo que demuestra que la comunidad acertó con las medidas y que Sánchez no se guió por criterios epidemiológicos, sino puramente ideológicos. Han sido las estadísticas las que han obligado al Ejecutivo a ceder ante las exigencias de Díaz Ayuso, que siempre ha mantenido que un cierre continuado de Madrid no garantiza el control de la situación y significaría la puntilla para miles de pequeños y medianos comercios, especialmente los de la hostelería.
La perseverancia de Ayuso ante la sectaria ofensiva socialcomunista ha dado resultados y el Gobierno se ha rendido a la evidencia. Madrid ha mejorado su situación sanitaria y se encuentra en condiciones más favorables que otros territorios. El cierre por etapas de Ayuso -en los dos próximos puentes-es una medida razonable que viene avalada por los resultados cosechados en las últimas semanas. La presidenta madrileña no se rindió jamás y el tiempo le ha dado la razón. Sánchez, esta vez, ha pinchado en hueso.