¿A qué esperas para impedirlo, Rajoy?
Se imaginan ustedes que una fuerza armada entrase en el Congreso de los Diputados y declarara abolido el nombre de ‘España’ para llamarnos, por ejemplo, ‘Hispania’ y por la fuerza derrocara todo lo que hemos construido juntos. ¿Ustedes se creen que la respuesta sería esperar a ver qué dice un Tribunal? ¿Verdad que no? Pues esto es lo que está pasando en Cataluña, donde unos golpistas han declarado que van a robarnos esa parte de España en octubre y el Gobierno no hace nada para impedirlo.
La obligación de un gobernante es defender el orden constitucional y la unidad de la patria. El Gobierno de España lleva cinco años haciendo dejación de sus funciones y permitiendo que los golpista se salten a la torera la Constitución y den un golpe de Estado a cámara lenta. Los españoles asistimos atónitos a la inacción de un Gobierno que trata el ataque en Cataluña como un mero sujeto jurídico. Es decir, tratan este intento de ruptura como un mero conflicto de competencias administrativas. Increíble pero cierto.
Es cierto que nuestro Código Penal presenta ciertas debilidades pero hay armas jurídicas suficientes así que no es excusa permanecer quietos. Es cierto también que Rajoy ha tenido mayoría absoluta para haber podido reforzar el Código Penal, pero como otras tantas cosas no lo ha hecho. Así que hay que jugar con las fichas que tenemos, suficientes para ganar la partida a esos individuos que quieren robar esa parte de España llamada Cataluña. Los complejos maniatan al Ejecutivo. Rajoy cree que sería considerado un acto de provocación y por ahora no ha mostrado valor para efectuarlo.
El presidente del Gobierno sabe que si aplica el artículo 155 se quedará solo pues ni Ciudadanos ni PSOE le iban a apoyar. El partido que preside Rajoy se está acabando y vamos a perder España. Tenemos que aplicar el artículo 155 y recuperar el poder efectivo en esa parte de España llamada Cataluña. Hay que hacerlo con serenidad pero también con firmeza. Hay que restaurar los daños que el odio separatista ha causado. Hay que recuperar, después de parar el golpe, las competencias en Educación y Seguridad que han sido utilizadas por los golpistas parece hacerle daño a España. Por todo ello, señor Rajoy, no se esconda y sea valiente. Su país necesita valentía y firmeza en este momento tan difícil de nuestra historia. Demuestre la lealtad a su juramento y recupere la normalidad en Cataluña como parte de España que es.