Iglesias es falso hasta cogiendo un taxi

Iglesias es falso hasta cogiendo un taxi

El candidato de Podemos a las elecciones del 4M es un impostor de libro: sus actos contradicen sus palabras a un ritmo imposible de seguir. Prometió no vivir nunca como un rico, sino como vive la gente trabajadora, y terminó residiendo en un casoplón custodiado por la Guardia Civil. Prometió que cuando dejara el cargo de vicepresidente renunciaría a la bicoca del 80% del sueldo, pero lo primero que hizo cuando renunció al  puesto fue pedir hasta el último céntimo de euro.

Todo en él es mentira y cada uno de sus gestos, hasta el más nimio, le retratan como un fatuo: su llegada en taxi al debate de Telemadrid  era un gesto reivindicativo, después de que hace días anunciara el fichaje para su lista de un taxista. En realidad, el taxista  es un veterano militante del partido, un histórico dirigente del PCE en Parla que fue concejal por Izquierda Unida entre 1991 y 2003. Cecilio González, además de estar enrolado en la actividad del PCE de Parla durante décadas, ocupando además cargos públicos, ha sido miembro  de la junta directiva de Élite Taxi, que mantiene una guerra abierta con las empresas VTC.

Iglesias llegó en un taxi convenientemente elegido para dar imagen de humildad, de hombre corriente, pero regresó a su casoplón en en un coche privado al término del debate, cuando ya no había tantas cámaras. Hace unos días, Iglesias publicó un vídeo explicando las razones por las que había fichado al taxista Cecilio, destacando «su compromiso por los servicios públicos». «El 4M la Comunidad de Madrid debe dejar de servir a unos pocos para trabajar para la mayoría», recalcó Iglesias. Pero no dijo quién era Cecilio, un comunista que aseguró que «el 4 de mayo es muy importante ganar las elecciones no solo por sacar a la derecha de la Comunidad de Madrid, sino para defender derechos públicos y para que en el futuro tengamos más derechos y no más miserias en la Comunidad», sentenció.

Que Pablo Iglesias ha hecho de la impostura una forma de vida lo demuestran todos y cada uno de sus actos. Es falso hasta cogiendo un taxi.

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