La enésima prueba que demuestra que el Gobierno miente

La enésima prueba que demuestra que el Gobierno miente
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Por si no hubiera pruebas bastantes de que el Gobierno conocía los riesgos del coronavirus y su amenaza para la salud de los españoles y, pese a todo, permitió y alentó las manifestaciones feministas del 8-M, OKDIARIO aporta otra más: la directora de Salud Pública reconoció seis días antes del 8 de marzo que el Gobierno estaba alertado desde el 31 de diciembre. La intervención de Pilar Aparicio es reveladora y concluyente: «Nuestra preocupación es que la epidemia de este nuevo coronavirus  no se instale entre nosotros; es decir que no tengamos un nuevo virus además de los que ya tenemos». Y añadió: «Nos preocupa cuando vemos situaciones como las de Italia, más cerca de casa, un país que tiene muchísimo intercambio con nosotros y nos preocupa, en concreto, no solamente el aumento de número de casos, el aumento del número de Comunidades implicadas, también estos casos en los que no podemos encontrar un vínculo claro de dónde se ha originado el contacto con esta infección».

Faltaban seis días para las multitudinarias manifestaciones feministas y la directora de Salud Pública reconocía el «aumento del número de casos», el «número de Comunidades implicadas» y el desconocimiento de dónde «se ha originado el contacto con esta infección». Y, sin embargo, seis días después centenares de miles de personas se manifestaban alentadas por un Ejecutivo que, pese a conocer el riesgo que esas concentraciones suponían, no las prohibió, sino que encabezó la manifestación.

El documento que aporta OKDIARIO es el enésimo que desmiente al Ejecutivo socialista. Su excusa es que en aquellas fechas no podían valorar el riesgo y que actuaron en todo  momento siguiendo las recomendaciones de los expertos. Mienten con obscenidad. Las palabras de la directora de Salud Pública no admiten duda alguna: crecían los casos y se extendían por todo el territorio nacional. Incapaz de aceptar la verdad, el socialcomunismo prosigue con su absurda estrategia de negar la evidencia. Pedro Sánchez es culpable. Y hay tantas pruebas que así lo constatan que el Gobierno podrá seguir desgranando mentiras. Cuanto más se justifican con argumentos falsarios, más se retratan.

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