El impuesto «para ricos» que plantea Sánchez ya está en la propuesta fiscal de Lobato para Madrid

El Gobierno de Pedro Sánchez ha avanzado, por boca de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que están trabajando en la posibilidad de crear un nuevo impuesto a las grandes fortunas. Una iniciativa que el líder del PSOE en Madrid, Juan Lobato, ya plantea en su propuesta de reforma fiscal para la Comunidad de Madrid.

Tal y como ha recordado el propio Lobato al conocer las intenciones del Ejecutivo Central de ceder a las peticiones de Podemos e implantar de forma temporal ese tributo «para ricos» a partir del 1 de enero de 2023, los socialistas madrileños ya planteaban ese impuesto en su Propuesta de Reforma Fiscal para Madrid que presentaron a finales del pasado mes de mayo.

En concreto, la propuesta del que será candidato del PSOE a las elecciones de la Comunidad de Madrid el año que viene, quiere gravar a los «ricos» que tengan un patrimonio superior a 1,5 millones de euros a través del impuesto de Patrimonio que, en la actualidad, está bonificado al 100% en la región capitalina.

Asimismo, plantea bonificaciones del 75% hasta 4 millones de euros, del 50% hasta 10 millones de euros y del 25% para más de 10 millones de euros, mientras que los patrimonios hasta 1,5 millones estarían exentos.

«Este es el modelo que presentamos hace cuatro meses, de tal forma que solo se grava el patrimonio especulativo, aquel que no está al servicio de la economía, aquel que no está al servicio del empleo. Y yo creo que eso, con un mínimo exento, elevado como el que planteábamos, deja fuera de tributación a la inmensa mayoría de los ciudadanos y solo hace tributar a aquellos que están puramente especulando con patrimonio, multimillonarios», ha afirmado Lobato después de conocer las intenciones del Gobierno de Sánchez, al tiempo que ha agregado que «es un modelo que se puede aplicar en Madrid, como planteábamos, pero que también es ampliable a todo el territorio nacional y es un modelo absolutamente justo y redistributivo».

Mientras tanto, Montero ha eludido dar detalles sobre el eventual futuro impuesto que están ideando desde el Palacio de la Moncloa, porque «hay que dejar que los técnicos trabajen», pero ha apuntado que sería temporal -igual que los gravámenes a las energéticas y la banca, que estarán vigentes dos años-.

La ministra también ha mostrado su intención de que el impuesto esté en vigor a comienzos del próximo año, aunque «habrá que ver la tramitación», y tampoco ha desvelado si se incluirá en los Presupuestos de 2023.

Por su parte, Félix Bolaños ha precisado hoy que el Gobierno tiene la obligación de estudiar escenarios y las distintas vías para que «los que más recursos tienen aporten más al Estado», que «es lo que dice la Constitución». Ha admitido que están trabajando en la opción de gravar a las grandes fortunas, porque «la situación es dinámica y vamos viendo las necesidades económicas que tiene el Estado», y ha recordado que en Europa ya se aplica este impuesto, aunque «con diferentes denominaciones».