Investigación
'Caso hidrocarburos'

Un testaferro del caso del fuel ante Pedraz: «Acepté figurar porque tenía problemas de droga y alcohol»

OKDIARIO accede a las 46 transferencias que realizó por valor de más de 35 millones de euros

Iván Castañer, uno de los testaferros implicados en el caso hidrocarburos que investiga la Audiencia Nacional, declaró ante el juez Santiago Pedraz reconociendo su función como administrador sobre el papel de la empresa Skyward Tech por «problemas con las drogas y el alcohol».

Durante su comparecencia en vídeo que desvela OKDIARIO, Castañer admitió haber aceptado este cargo en un momento de extrema vulnerabilidad personal: «Me lo ofrecieron cuando mis padres me habían echado de casa. Yo tenía problemas con las drogas y el alcohol y me ofrecieron un dinero a cambio de hacer esto. Y yo acepté», confesó.

El investigado, que cuenta únicamente con un grado medio en diseño gráfico y cero experiencia en gestión empresarial, detalló cómo fue captado por intermediarios para servir como la cara visible de una sociedad que movió millones de euros en apenas unos meses. Todo ello gracias al título de operador otorgado por el Gobierno de España de Pedro Sánchez.

«Conocí a un tal Pepe Antonio, porque a veces se presentaba con un nombre y a veces con otro. Y después este me presentó a Santiago Sirera», explicó al juez, señalando a Santiago como el verdadero gestor de la empresa.

Un hombre de paja

Castañer describió con precisión el modus operandi de la supuesta trama: «Me compraron un traje y fuimos a la notaría a firmar. Quedábamos casi todos los días de lunes a viernes, el fin de semana no. Yo tenía que estar ahí a las 8:00 hasta las 14:00 de la tarde».

El joven relató cómo su única función era realizar transferencias bancarias siguiendo instrucciones: «A él [Santiago] siempre por WhatsApp le llegaba un mensaje… y en el mensaje ponía pues siempre, casi siempre lo mismo. Y era Villafuel. Pues yo qué sé, 1 millón de euros, 2 millones de euros. Y yo tenía que entrar al BBVA y hacer la transferencia vía Banco de España».

Estas operaciones se realizaron inicialmente desde una oficina del BBVA en Castelldefels y posteriormente desde otra en Paseo de Gracia en Barcelona, cuando «la directora del banco nos empezó a poner bastantes trabas para seguir haciendo estas operaciones», según indicó el investigado.

Desconocimiento del negocio

Durante su declaración, Castañer insistió en que desconocía por completo la naturaleza del negocio y el propósito de las transferencias. «A mí me dijeron que era un tema de papeles», afirmó al fiscal, negando haber tenido cualquier conocimiento sobre un posible fraude fiscal.

Tampoco estaba al tanto de la existencia de un supuesto acuerdo marco de distribución de productos petrolíferos entre Skyward Tech y Villafuel, la empresa beneficiaria de las transferencias.

El testaferro confesó que nunca tuvo acceso a correo electrónico corporativo ni intervino en la toma de decisiones empresariales: «No tengo ningún tipo de vinculación con la empresa ni nada más», aseguró al juez.

35 millones en 46 transferencias

Tras su declaración, la defensa de Castañer ha presentado un escrito ante el Juzgado Central de Instrucción aportando documentación de casi 50 órdenes de transferencia realizadas entre junio y agosto de 2023 desde la cuenta que Skyward Tech mantenía en el BBVA hacia Villafuel Combustibles SL. La ex senadora del PSOE Esmeralda Iranzo asesoró legalmente al líder de la trama investigada.

Estas transferencias, que suman más de 35 millones de euros, incluyen operaciones por importes tan elevados como 2.546.960,30 euros (19 de julio), 2.607.619,70 euros (23 de junio) o 2.232.294,30 euros (16 de junio). Cada operación conllevaba una comisión bancaria estándar de 999,99 euros.

Una de las múltiples transferencias realizadas.

La investigación intenta esclarecer los vínculos entre Skyward Tech, Villafuel y otras sociedades intermediarias en el sector de hidrocarburos. Cuando fue preguntado por el fiscal sobre si conocía a Víctor de Aldama, uno de los principales investigados en esta causa, Castañer respondió: «Bueno, Aldama este sí que me suena, pero no lo conozco».

Según las hipótesis de los investigadores, Villafuel habría comenzado a adquirir productos petrolíferos a través de un depósito fiscal, utilizando sociedades intermedias como Skyward Tech en una compleja operativa diseñada para eludir el pago de impuestos.

Colaboración con la Justicia

A diferencia de otros implicados, Castañer ha mostrado desde el principio su voluntad de colaborar plenamente con la investigación. «Cuando vi todo esto, intenté escribir a la Guardia Civil», declaró, aunque según su testimonio no obtuvo respuesta. Posteriormente envió un correo electrónico al juzgado antes de ser llamado a declarar.

«Estoy dispuesto a colaborar en todo lo que sea preciso en esta investigación», afirmó durante la comparecencia. A preguntas de su abogada, confirmó que era «la primera vez» que se encuentra involucrado «en un procedimiento de estas características».

Castañer también ha manifestado su disposición a someterse a pruebas de detección de sustancias estupefacientes para corroborar sus problemas de adicción, un factor que considera determinante en su implicación en los hechos.

El caso, que se encuentra actualmente en fase de instrucción, forma parte de una investigación más amplia sobre presuntas irregularidades fiscales en el sector de los hidrocarburos. Salpica al Gobierno de Pedro Sánchez, ya que los responsables de Villafuel SL, gracias a la trama Ábalos, consiguieron reuniones con altos cargos del Ejecutivo previas a poder operar. Además, responsables de esa empresa compraron un chalet en La Alcaidesa (Cádiz) a través de la mercantil Have Got Time SL, que usó Ábalos tras pagar varios meses de alquiler y antes de ser desahuciado por dejar de pagar.