Trump dice que los «horribles crímenes» de Al Assad no quedarán impunes
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha acusado este martes al presidente sirio, Bashar al Assad, de haber cometido «crímenes horribles» contra la humanidad y ha prometido impedir que su régimen vuelva a realizar ataques con armas químicas.
«No soy un fan de Assad. Creo que lo que ha hecho a ese país y a la humanidad es horrible», dijo Trump en una conferencia de prensa junto al primer ministro libanés, Saad Hariri. «No soy alguien que se vaya a mantener al margen y permitir que quede impune después de lo que intentó hacer y ha hecho en varias ocasiones».
En abril Estados Unidos atacó posiciones del régimen sirio
Trump recordó que a principios de abril había ordenado un ataque contra una base militar siria en represalia por un ataque con armas químicas atribuido al régimen de Damasco. Ese ataque químico contra la localidad siria de Jan Cheijun el 4 de abril había provocado 87 muertos, entre ellos numerosos niños. El régimen sirio apoyado por su aliada Rusia, desmintió ser el responsable del ataque.
Críticas a la administración Obama
En lo que atañe a Assad, el presidente republicano se refirió una vez más a su predecesor, Barack Obama, al que acusó de haber «fijado una línea roja en la arena», en alusión al compromiso asumido en 2013 del presidente demócrata de intervenir contra Damasco en caso de uso de armas químicas por el régimen.
Una promesa de ataques militares sobre la que Obama dio marcha atrás a último momento en agosto de 2013.
«Si el presidente Obama hubiera cruzado esa línea y hecho lo que debió haber hecho, creo que no tendríamos a Rusia ni tendríamos a Irán» interviniendo en Siria, ha afirmado el actual ocupante de la Casa Blanca.
La administración Obama ha sido criticada por haberse retirado progresivamente del terreno diplomático y militar en Siria a partir de 2015 en beneficio de Moscú y Teherán, aliados de Damasco.
Al lado del primer ministro libanés, Trump criticó también al movimiento palestino Hezbolá, del que dijo que es «una amenaza para el Estado libanés, el pueblo libanés y toda la región».