Estas son las condiciones pactadas con los ocupantes rusos de Jersón «para que no disparen a la gente»
El alcalde de Jersón, Igor Kolijaiev, una de las ciudades ocupadas por el ejército ruso ha pactado con los invasores una serie de condiciones para «que no disparen a los ciudadanos». Esta localidad situada al sur de Ucrania tiene 290.000 habitantes y cayó en manos del enemigo el pasado miércoles.
- Los ciudadanos sólo podrán trasladarse durante el día en coche para realizar compras esenciales, como comida o medicinas.
- Toque de queda «estricto» de ocho de la tarde a seis de la mañana.
- El transporte público volverá a funcionar para que los trabajadores «de panadería, tiendas o farmacias» puedan abrir los comercios.
- Prohibición de andar por la ciudad en grupos.
- Los coches deberán circular «a velocidad mínima» y los conductores deben «mostrar el contenido del transporte en cualquier momento».
A cambio, el alcalde ha conseguido que en el ayuntamiento siga ondenado la bandera de Ucrania. «Y para que siga siendo así habrá que cumplir estos requisitos», ha dicho en su cuenta de Facebook.
«Mi equipo y yo somos personas pacíficas, no teníamos armas ni agresión de nuestro lado. Hemos demostrado que estamos trabajando para asegurar la ciudad y estamos tratando de eliminar las consecuencias de la invasión», añade Kolijaiev.
«No les hice promesas. No puedo prometer que solo estoy interesado en la viabilidad normal de nuestra ciudad! Simplemente pedí no disparar a la gente. No tenemos fuerzas armadas ucranianas en la ciudad, sólo civiles y personas que quieren vivir aquí».
Rusia aseguró este miércoles que sus fuerzas se habían hecho con el «control total» de la ciudad ucraniana de Jersón (sur), en el marco de la invasión iniciada el 24 de febrero por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.
«Las unidades de las Fuerzas Armadas de Rusia se han hecho con el control total de la capital de la provincia de Jersón», señaló el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov, según recogió la agencia rusa de noticias TASS.
«La infraestructura civil y las instalaciones de apoyo a la población y el transporte urbano operan con normalidad. La ciudad no experimenta escasez de alimentos o bienes esenciales», agregó, horas después de que los medios ucranianos informaran de una intensificación de los combates en la zona.
Rusia informó de que había «negociaciones» en marcha entre los militares y las autoridades municipales y provinciales para garantizar que la infraestructura esencial siguiera funcionando y afianzar la seguridad de la población de Jersón.
Horas antes del anuncio de Konashenkov, el alcalde de Jersón había confirmado que las tropas rusas habían tomado el puerto fluvial y la estación de ferrocarril de la ciudad, en la que viven cerca de 280.000 personas, sin que el Gobierno ucraniano se pronunciara al respecto.