Descubrimiento histórico en Extremadura: las monedas confirman el hallazgo de la ciudad perdida de Tamusia

Extremadura puede considerarse una mina para los arqueólogos. A lo largo de los años, se han encontrado calzadas romanas, piezas de cerámica, vestigios de construcciones medievales e incluso restos humanos que datan del siglo XIII.
Su riqueza también incluye antiguos yacimientos mineros, y ahora, un nuevo hallazgo permite resolver uno de los enigmas más intrigantes de la zona: la historia del castro de Villasviejas del Tamuja.
Excavaciones recientes han confirmado lo que durante años se consideró una hipótesis. Este asentamiento, ubicado en el municipio cacereño de Botija, corresponde a la antigua ciudad de Tamusia.
Los trabajos arqueológicos, dirigidos por el Instituto Arqueológico de Mérida (IAM) en colaboración con la Universidad de Extremadura y el Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICTYTEX), ya cuentan con pruebas contundentes que permiten reconstruir la historia del castro y su papel en la transición entre la cultura vetona y la romanización de la Península Ibérica.
Un hallazgo que rescribe la historia de Extremadura
Victorino Mayoral, investigador principal del IAM-CSIC, explicó en declaraciones a El Periódico Extremadura que uno de los hallazgos más importantes ha sido una moneda. Esta pieza, perteneciente a la serie bilingüe de Tamusia, aporta más información sobre la historia de la ciudad y su conexión con el castro de Villasviejas.
Durante años, algunos historiadores cuestionaron la autenticidad de estas monedas, ya que en la región se encontraron ejemplares con inscripciones en celtibérico y en latín. Ahora, este hallazgo aclara esas dudas.
Además de la moneda, las excavaciones han permitido estudiar en detalle la muralla que rodeaba la ciudad. Según Mayoral, su estado de conservación es muy bueno. Con un perímetro de 600 metros y una altura de hasta tres metros en algunos tramos, esta fortificación refleja la importancia que tuvo el asentamiento antes de su abandono en el siglo I a.C.
Las excavaciones también han sacado a la luz estructuras construidas sobre la muralla original, lo que indica que el asentamiento siguió ocupado tras su caída. Entre los materiales encontrados destacan proyectiles de honda y ánforas romanas, lo que vincula a Villasviejas con la Guerra de Sertorio (82-72 a.C.), un conflicto que marcó el final de la República Romana.
Estos hallazgos refuerzan la idea de que la ciudad tuvo un papel estratégico en los enfrentamientos entre los seguidores de Sertorio y las tropas de Pompeyo. Además, el incendio y abandono del campamento militar de Cáceres el Viejo, fechado en la misma época, sugiere que Tamusia pudo haber sido un punto clave en la contienda.
Una oportunidad para el turismo en Extremadura
Más allá de su valor histórico, el hallazgo de Tamusia abre la puerta a nuevas oportunidades para el turismo arqueológico en Extremadura. Victorino Mayoral destaca la importancia de combinar la investigación con la divulgación. «Si seguimos trabajando, podemos dotar al castro de un recurso muy interesante para su visita turística», sostiene.
El sitio cuenta con condiciones favorables para el turismo, ya que es accesible por carretera y está cerca de la ciudad de Cáceres. Su valor histórico lo hace único dentro de la oferta turística de la región, al ser el único asentamiento de la Edad de Hierro identificado en la provincia.
Impulsar Villasviejas como destino de turismo cultural no sólo ayudaría a conservar el yacimiento, sino que también podría generar oportunidades económicas para la población local.
Las excavaciones siguen en marcha con el apoyo de la Consejería de Educación, Ciencia y Formación Profesional de la Junta de Extremadura.