Hugo Sierra disfruta de su hijo en Canarias y lo comparte con esta imagen

La llegada del buen tiempo ha hecho que las nuevas parejas del verano disfruten de sus vacaciones. Hugo Sierra e Ivana Icardi están en su mejor momento tras ‘Supervivientes 2020’. Actualmente están en una especie de luna de miel disfrutando de su felicidad. La pareja está viviendo sus primeras vacaciones juntos en Maspalomas.

Pero en este destino paradisíaco no están solos, están con el hijo del uruguayo y Adara Molinero, Martín. Hugo no ha dudado en compartir con sus seguidores diferentes instantáneas en su perfil de Instagram de su novia y su hijo, demostrando que está más feliz que nunca.

En concreto, Hugo Sierra ha subido una foto en la que aparece sujetando en brazos a su hijo Martín en una duna de Maspalomas. El exconcursante de ‘Supervivientes’ ha decidido compartir la imagen dos veces, una en blanco y negro y la otra en color. En la segunda publicación podemos ver como Hugo y Martín van perfectamente conjuntados ya que llevan un bañador del mismo tono.

“Te disfruto mucho Mapapote!!! Cada instante…”, escribía orgulloso el uruguayo junto a las fotografías donde demuestra que está muy feliz junto a su pareja, Ivana Icardi, y su hijo, Martín, en Gran Canaria. Todo esto sucede mientras que su expareja Adara Molinero, con la que ha tenido muchos debates y discusiones públicas, disfruta de sus vacaciones en Ibiza con su nueva ilusión, Rodri Fuertes.

Adara Molinero se decidió por las Islas Baleares para celebrar su primer mes de amor mientras que Hugo e Ivana se han quedado en el archipiélago canario disfrutando de unas vacaciones muy diferentes a las de la nueva pareja ya que ellos nos demuestran que tienen un plan más familiar al contar con la compañía de Martín.

Y es que Adara Molinero y Rodri Fuertes están dando rienda suelta a su amor durante sus románticas vacaciones en Ibiza, donde han publicado su primera fotografía juntos en Instagram, a pesar de querer llevar su relación de una manera muy discreta. Sea como sea, está claro que tanto Hugo como Adara son felices y, lo más importante, es que el hijo que tienen en común también lo es.