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‘First Dates’: Estos comensales, enfrentados en plena cita

Estos dos comensales tuvieron una cita peculiar

First Dates
First Dates

‘First Dates’ es uno de los programas más románticos de la televisión, pero a veces nos encontramos con parejas que dan problemas de más para encontrar el amor. En el último programa del 31 de marzo, Esther de 78 años vino buscando un compañero para salir por ahí y «hablar con él lo que me quede de vida».

La viuda que venía de Madrid quería un «hombre serio, cariñoso, que me achuche». Unos requisitos sencillos que su cita Pepe de 81 años, no cumplió. Tampoco le dió la posibilidad de mostrarlo ya que nada más entrar por la puerta Esther le dio la espalda y reconoció que no le gustaba nada.

En el confesionario declaraba: «No me ha gustado no es lo que esperaba. No me gusta ni de cara ni de cuerpo. A mí me gustan altos, un poco más delgados». Y desde ahí la cita no mejoró. Antes incluso de sentarse a la mesa Pepe la llamó de usted y las cosas se pusieron tensas.

Esther no se mostraba cooperativa. El de Alicante la preguntó que se contaba y ella respondió «nada» tajantemente. Después le confesó que buscaba «alguien con quien convivir lo que queda de vida» y Esther le cortó rápidamente: «Yo para convivir no quiero nada»

Pepe sentía la animosidad y así lo contaba: «La distancia ha comenzado marcándola desde el primer momento y ya desde ahí…» El altercado final se ha producido cuando Pepe ha contado que a sus 81 años aún conduce y tiene el carnet renovado algo para 5 años, algo que Esther no aceptaba de ninguna manera.

«El trato de Esther me ha parecido soberbio y yo por ahí no paso», comentaba Pepe al final de la cita. En la decisión final la madrileña aprovechó para volver al tema del coche y más: «Le veo mayor, le veo muy grueso, que no hace gimnasia y no debería conducir con la edad y debería ser un poco más deportista».

Pepe tampoco quiso una segunda cita porque la vio muy «altiva». Esther no estaba de acuerdo:»Yo no llevo las riendas de nadie», pero acto seguido se enzarzaba otra vez en el mismo discurso:»Tienes que andar un poquito que es muy bueno para la salud y tienes que dejar de conducir».

El alicantino no aguantó más y se mantuvo firme: «El coche mientras yo me encuentre capacitado lo voy a tener» y Esther le llamó «cabezón». Aún así decidieron intercambiarse los número y ser «amigos siempre». Las situaciones en ‘First Dates’ nunca dejan de sorprenderte.

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