La viuda de un guardia civil rechaza saludar a Chivite en el acto de homenaje al agente
«No es bienvenida». María José Rama, viuda del guardia civil Juan Carlos Beiro asesinado por ETA en 2002, se ha negado a saludar a la presidenta de Navarra, María Chivite, en el acto de homenaje al agente celebrado esta mañana con motivo del 17º aniversario de su asesinato en la localidad de Leiza.
Rama, además, ha criticado con dureza a la presidenta navarra por hacer accedido al cargo gracias a la abstención de Bildu. La escena ha tenido lugar en el homenaje a Beiro celebrado en Leiza, al que han acudido numerosas autoridades de la Comunidad foral, de la Guardia Civil, de la Policía Nacional, de la Policía Foral y del Ejército.
Tras percatarse de la presencia de María Chivite, María Jose Rama ha dicho a los periodistas: «Para mí no es bienvenida ella aquí porque no está haciendo lo que debería y se junta con quien no debería. Igual que Uxue Barkos. Yo con esa gente no. Para mí no son gratos, que venga, que siga viniendo, que haga lo que quiera, pero sé que no viene de corazón y su conciencia no es la mía, con lo cual, para mí sobra».
La viuda del guardia civil asesinado ha destacado en referencia a María Chivite que «nadie la invitó, ella ha venido porque esto no es privado, es público, ha venido porque le ha dado la gana, yo estoy en mi derecho de saludarla o de no saludarla».
«Está gobernando con etarras»
«No piensa como yo. No la voy a saludar», ha añadido: «Cómo pretendes que la vaya a saludar cuando está gobernando con etarras».
«¿Con qué conciencia la saludo? El problema es de ella, que viene, yo no la quiero aquí para nada, nunca la tuve y nunca la necesitaré, lo siento mucho», ha afirmado. María Chivite, por su parte, ha preferido no hacer declaraciones a los medios de comunicación.
En cuanto al homenaje a su marido, cuyo asesinato está aún por esclarecer, María José Rama ha señalado que «siempre son los mismos sentimientos, dolor, tristeza, angustia, injusticia, porque si sigo viniendo es también para hacer un llamamiento a que se siga investigando, a que no se quede en el olvido, a que busquen».
«Es que no sabemos nada. Están sin juzgar, sin detener, sin condenar, y eso es muy triste. Son 17 años, a los 20 prescribe. La esperanza va decayendo, pero aquí estamos y aquí seguiremos, y seguiremos pidiendo justicia, para él y para todos los demás, hay 300 o más -crímenes- sin resolver», ha denunciado la viuda del guardia civil asesinado.
Pancarta trampa
El homenaje se ha desarrollado en el lugar en el que fue asesinado Juan Carlos Beiro mientras retiraba una pancarta trampa que escondía una bomba. Se han depositado varias coronas de flores junto a la placa que recuerda al cabo de la Guardia Civil, una placa con la siguiente leyenda: ‘Querido Juan Carlos, aquí te quitaron la vida por defender la paz y la libertad. Para tu familia, amigos de Leiza y los que te quisimos serás paloma en libertad’. En el lugar se ha colocado también una bandera de España en la que se leía ‘La Guardia Civil muere pero no se rinde’.
En el acto han estado presentes, además de Chivite, el delegado del Gobierno en Navarra, José Luis Arasti; la consejera de Relaciones Ciudadanas del Gobierno foral, Ana Ollo; el director general de Paz y Convivencia del Gobierno de Navarra, Martín Zabalza; el coronel jefe de la Guardia Civil en Navarra, José Santiago Martín Gómez; el jefe de la Policía Nacional en Navarra, Francisco López Canedo; el jefe de la Policía Foral, Juan Carlos Zapico; el portavoz de Navarra Suma y presidente de UPN, Javier Esparza; así como varios parlamentarios de Navarra Suma y de PSN.
En el acto ha intervenido Silvestre Zubitur, concejal de Navarra Suma en Leita, quien ha pedido que la Guardia Civil «se quede» en Navarra. «Queremos que España sepa que Navarra ama a la Guardia Navarra, que Navarra es y se siente España y que amamos al resto de españoles nuestros compatriotas», ha asegurado.