El Tribunal de Cuentas juzga los 200.000 € en dietas ilegales de Uxue Barkos desvelados por OKDIARIO
El Tribunal de Cuentas ha dejado visto para sentencia el juicio sobre la ilegalidad de las dietas que cobró Uxue Barkos, actual presidenta de Navarra, cuando era concejal en Pamplona. El montante asciende a algo más de 69.000 euros ingresados directamente por Barkos y casi 140.000 que cobraron otros ediles con su autorización, como desveló OKDIARIO en abril del pasado año.
Barkos, de Geroa Bai, compaginó durante dos legislaturas su cargo de edil en la capital navarra con un escaño como diputada en el Congreso y, según la asociación Justitia et Veritas, que ejerce la acusación, en este tiempo percibió dietas por reuniones en Pamplona, con ciudadanos, colectivos o compañeros de grupo en el Ayuntamiento, cuando en realidad supuestamente se encontraba en Madrid.
Mientras se celebraba el juicio, Barkos presidía la reunión de su Ejecutivo en Pamplona y su abogado la representaba en la vista. Tras el consejo, la portavoz del Gobierno de Navarra, María Solana, ha dicho hoy que esta institución «no tiene una valoración» del juicio.
Según Solana, no ha habido «ocasión de tratar esta cuestión» durante la reunión del consejo. «No le hemos dedicado un espacio», ha puntualizado.
Justitia et Veritas eleva la cifra de cobros presuntamente indebidos a algo más de 208.000 euros, ya que reclama a Barkos 69.435 euros cobrados del Consistorio pamplonés entre 2007 y 2012, y además pide la devolución de otros 139.174 euros por dietas supuestamente fraudulentas que sus compañeros pudieron cobrar al avalar ella con su firma las reuniones que daban derecho a la percepción.
Para la acusación, la ahora presidenta de Navarra incurrió durante ese periodo de tiempo en una «responsabilidad contable» al saber que el sistema de dietas del Ayuntamiento de Pamplona hacía que su firma fuera determinante para abonarlas sin necesidad de que se presentara ningún otro justificante de que realmente las reuniones se habían celebrado.
Por eso, la asociación ha querido demostrar este «ilícito contable» a través de la relación de viajes que entre Pamplona y Madrid realizó la diputada Uxue Barkos durante esos años a cargo del Congreso.
La idea era comprobar si las fechas que tiene registradas la Cámara Baja coinciden con las de las reuniones cobradas por Barkos en Pamplona y de las que Justitia et Veritas asegura que no hay convocatoria ni actas.
La acusación cree que incluso se falsificaba la firma de Barkos para que ésta pudiera cobrar la correspondiente dieta de asistencia sin estar presente.
Según la asociación, entre 2007 y 2012 hubo años en los que Barkos llegó a percibir dietas del Ayuntamiento por la máxima cantidad de reuniones que estaban autorizadas anualmente, un total de 156, lo que le reportó casi 18.000 euros, una cantidad a la que sumaba otras dietas de la Mancomunidad de Aguas de la Comarca de Pamplona y el sueldo del Congreso como diputada.
Esta falta de control en el pago de dietas, conocida en 2012, hizo que al año siguiente, en 2013, el Ayuntamiento de Pamplona cambiara el sistema de percepción.