Simón admite al fin que falló como jefe de las alertas: «Nos dimos cuenta cuando todo había explotado»
El portavoz técnico de Sanidad, Fernando Simón, ha admitido este lunes que no vieron venir la pandemia del coronavirus hasta que todo «había explotado».
Así ha respondido Simón preguntado por si pensaba, en marzo, que la crisis podía prolongarse durante tanto tiempo y por su balance de estos meses.
«Es cierto que las cosas obviamente podían haber ido mucho mejor si no hubiéramos tenido lo que sucedió en Italia. En Italia, al igual que aquí, igual que en todos los países… que nos hemos dado cuenta cuando todo ha explotado. Nos pensábamos que la vigilancia nos estaba permitiendo detectar algo más, sabíamos que todo no, pero sí algo más de lo que podíamos estar detectando», ha admitido Simón.
A principios de marzo, Simón calculó que «en el peor de los escenarios, la transmisión podría prolongarse hasta 4 o 5 meses». El responsable del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad (CCAES) considera que el pronóstico fue acertado.
«Creo que vamos bien. Pero es verdad que si no hubiera sucedido lo de Italia no me hubiera esperado esto. Si el riesgo hubiera venido de China me hubiera esperado menos tiempo. Cuando el riesgo empezó a venir de Italia las cosas cambiaron radicalmente. Eso era otra cosa», ha dicho Simón.
No obstante, cabe recordar que la alerta en Italia era evidente desde mucho antes que el Gobierno español se decidiese a adoptar medidas drásticas. Por poner un ejemplo, el 7 de marzo -un día antes de las marchas ideológicas por el Día de la Mujer- el país transalpino confirmaba ya 4.636 contagios, como quedó reflejado en el informe elaborado por el departamento de Seguridad Nacional, además de 197 fallecidos.
Simón ha admitido además que no supo calibrar el impacto. «Probablemente, pensar que hubiéramos tenido un cuarto de millón de casos habría sido difícil de detectar», ha reconocido.
Caos con los muertos
Por otro lado, el portavoz no ha despejado cuándo se conocerá el número total de fallecidos por la pandemia.
Simón ha achacado el caos en el recuento de Sanidad, que claramente minusvalora el drama de los fallecidos, a la urgencia por disponer de datos «para la vigilancia y evolución de la epidemia».
Sin embargo, ha admitido que existe «un exceso de mortalidad muy importante», de «43.000 y pico fallecidos», según reflejan los informes del Sistema de Vigilancia MoMo, del Instituto de Salud Carlos III, en el periodo coincidente con la pandemia.
«De los que nos falten, no sé si son 12.000 o 13.000, habrá una parte que habrá fallecido por coronavirus sin diagnóstico, otros que son compatibles con coronavirus pero que no han sido introducidos en las bases de datos y otros que habrán muerto de otra cosa. Tenemos que ver lo que pasa con los certificados de defunción», ha añadido Simón.
No obstante, ha despreciado a los fallecidos que aún no han sido incorporados al balance oficial. «Si sabemos que casi el 70% del exceso es claramente atribuible al coronavirus que sea el 80% no sé si conceptualmente cambia mucho», ha considerado.
El responsable del CCAES ha explicado que «las bases de datos de mortalidad por causa se suelen cerrar en España con entre 8 y 10 meses de retraso» y que «todo ese proceso» de identificar las defunciones «se va a hacer como se hace todos los años con las enfermedades».
Por otro lado, Simón ha admitido su preocupación por los rebrotes locales, así como por los derivados de los contagios importados, aunque ha considerado que «estamos en una situación mucho mejor para poder reaccionar ante cualquier brote».
Sanidad ha descartado realizar pruebas PCR a todos los viajeros. Según Simón, «alguna PCR será útil, pero también puede ser que te infectes el día del viaje, con lo cual no podemos dar un peso excesivo a las PCR». «Hay que utilizar bien los recursos porque son limitados», ha añadido. Ha considerado que «hay otras medidas que pueden disuadir», como «las cámaras de temperatura». «Yo no he sido nunca muy fan», ha añadido.