Sanidad anuncia test masivos en residencias y hospitales a pesar de que duda de su fiabilidad

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El Gobierno pretende poner en marcha una estrategia de test rápidos para detectar el coronavirus, especialmente en aquellos lugares más afectados por la epidemia, como hospitales y residencias. Sin embargo, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha admitido indirectamente las dudas sobre su fiabilidad.

En rueda de prensa tras la reunión de Pedro Sánchez con los presidentes autonómicos, Illa ha explicado que «los test sobre los que va a descansar la estrategia de test masivos son los conocidos como PCR» (cuyo procedimiento es más largo) y, a continuación, ha destacado que estos «son los más fiables».

Estas pruebas, ha añadido, «se van a complementar con los test rápidos» lo que permitirá «hacer un cribado rápido en aquellos lugares con prevalencia, como hospitales o residencias».

El Ejecutivo, ha anunciado, ha comenzado a repartir un millón de test rápidos que las comunidades autónomas recibirán «como tarde» este lunes por la mañana. Illa ha asegurado que se han analizado más de 70 test de este tipo.

El ministro ha insistido en que se harán «tantos test como sean posibles» pero ha subrayado que «los de referencia» seguirán siendo los PCR que «son los más importantes». Este tipo de prueba ofrece un resultado más fiable, aunque el procedimiento es también más lento. Illa ha señalado que España «hace de 15.000 a 20.000 diarios».

No obstante, ha añadido que la intención del Gobierno es «hacer más» pruebas, y para ello, recurrirá al otro tipo, los test rápidos -se han adquirido 5 millones, ha explicado, y permitirán «hacer un cribado en hospitales y residencias». Ha añadido que esas pruebas «pueden tener un segundo uso para testar la inmunidad de la población».

La polémica por la fiabilidad de los test adquiridos por el Gobierno no cesa. El pasado jueves, Illa ya admitió que el millón de test rápidos de coronavirus recibidos en un avión militar desde China tienen una sensibilidad del 64% para los pacientes que acaban de iniciar síntomas, por debajo del 70% aceptable reconocido por la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc) en su último informe.

Los test de «anticuerpos», ha dicho Illa, «funcionan en lugares como residencias», con alta prevalencia del virus, aunque «tienen que ir complementados» con otro tipo de pruebas. Casualmente, los lugares en los que el Gobierno pretende aplicar ese testeo masivo son de los más críticos: las residencias, especialmente azotadas por la pandemia, y con población muy vulnerable, y los propios hospitales, donde el personal sanitario se está viendo también muy golpeado.

Según el último balance del Ministerio de Sanidad, el número de muertos por la pandemia ha aumentado en 674 en las últimas 24 horas. Se trata de un incremento inferior al de este sábado, cuando se registraron 809 víctimas más, y la cifra menor de la semana. Los fallecidos ascienden a 12.418.

Sí se han incrementado en relación a la víspera los ingresos en UCI. Hay  6.861 ingresados en cuidados intensivos, frente a los 6.532 registrados el sábado. Hay que tener en cuenta que la cifra no es uniforme, ya que en algunas comunidades autónomas se recoge el número de pacientes que, en algún momento, han precisado de ingreso en cuidados intensivos mientras que en otras se indica la situación actual de estas unidades.