Sánchez se abre al indulto de los golpistas un año después de prometer que cumplirían íntegras las penas

A los expertos elegidos por Moncloa para el informe que supuestamente verifica los cumplimientos de los compromisos del Gobierno se les ha escapado algún que otro detalle de interés. El 14 de octubre del año pasado, Pedro Sánchez se comprometió en público a que los golpistas condenados por el Tribunal Supremo cumplirían íntegra sus penas. Este martes, el presidente ha dejado la puerta abierta a los indultos.

Eran las semanas previas a las elecciones generales del 10-N y en una rueda de prensa en el Palacio de La Moncloa, Sánchez proclamó: «El acatamiento de la sentencia significa su cumplimiento, reitero, su íntegro cumplimiento». Y añadió: «Nadie está por encima de la ley y todos estamos obligados a su cumplimiento». No había opción para los indultos.

Su discurso parecía nítido. «En una democracia -explicó- nadie es juzgado por sus ideas o por un proyecto político sino por delitos recogidos en el ordenamiento jurídico». Con claridad meridiana, el líder del PSOE fue más allá a la hora de juzgar qué pasó en Cataluña en el otoño de 2017: «Se ignoraron los derechos de la mayoría social no independentista de Cataluña y se ha originado con ello, una fractura de la convivencia dentro de la sociedad catalana».

Este martes, Sánchez no ha dejado ni una sola frase que haga pensar que lo que defendió en campaña electoral con tanta determinación vaya a seguir siendo así un año después. Al contrario, el presidente ha proclamado que el suyo es «un Gobierno que apuesta por el reencuentro, por la reconciliación y por la convivencia para superar episodios aciagos que nos sonrojan al conjunto del país». Por lo visto, el acatamiento de la sentencia ya no implica
«su cumplimiento, reitero, su íntegro cumplimiento», según sus propias palabras el 14 de octubre de 2019.

Y donde el año pasado sólo veía la fractura de la sociedad catalana por culpa de un movimiento independentista que ignoró los derechos de la mayoría, hoy ha manifestado que «nadie está libre de culpa» y que «todos hemos cometido errores», en lo que sólo puede interpretarse como otro gesto hacia los socios independentistas que le han garantizado la estabilidad de su Gobierno.

Las palabras de Sánchez llegan después de que la vicepresidenta Carmen Calvo recordara que los indultos son posibles en contra del criterio de la Fiscalía y, por tanto, competencia exclusiva del Gobierno. Preguntado por estas palabras, Sánchez ha respondido que se pronunciará cuando el expediente llegue a la mesa del Consejo de Ministros, para lo que antes el Tribunal Supremo, que fue quien condenó a los solicitantes del indulto, deberá haber fijado una posición no vinculante. «Ahí será cuando yo me pronuncie y plantee cuál es la posición que tengo como presidente y del conjunto del Gobierno», ha afirmado Sánchez.

La Fiscalía del Tribunal Supremo ultima estos días el expediente con el que se opondrá al indulto de Oriol Junqueras y el resto de los dirigentes independentistas condenados, resistiendo así a las presiones de la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, ex ministra de Sánchez en la anterior legislatura.

Los condenados para los que se ha solicitado esta medida de gracia son, además del ex vicepresidente de la Generalitat, los ex consejeros Raül Romeva, Jordi Turull, Dolors Bassa, Josep Rull y Joaquim Forn, la ex presidenta del Parlament Carme Forcadell y los líderes de la ANC y de Òmnium, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart.

El fallo unánime del Supremo condenó a 99 años de cárcel a los dirigentes del golpe del 1-O. La pena más alta, 13 años de cárcel, fue para Junqueras, líder del ERC, la formación separatista que tras apoyar los Presupuestos Generales del Estado del próximo año fue incluida, junto a Bildu, en «la dirección de Estado», según palabras de Pablo Iglesias.

Moncloa prepara a los españoles para el indulto de todos los condenados porque, en palabras del ministro José Luis Ábalos, “el Gobierno tiene la obligación legal de tramitar los indultos y la obligación moral de aliviar tensiones que puedan dañar la convivencia”.