El Rey traslada su despacho a Marivent
Compaginar el tiempo dedicado al descanso y a las actividades deportivas, como la práctica de la vela, con el trabajo de despacho para seguir al minuto los asuntos de Estado y la actualidad del país son los dos ejes que guían al rey Felipe VI durante este periodo de vacaciones que inició este miércoles en Palma junto con su familia. Después de un año tan intenso como el transcurrido desde el verano pasado, cuando la situación política dio un vuelco total con el triunfo de la moción de censura que llevó a los socialistas al Gobierno, el Jefe del Estado se ha trasladado al Palacio de Marivent para renovar fuerzas que le permitan afrontar de nuevo la difícil y complicada situación que atraviesa España.
Quien piense que el monarca se va poder dedicar al 100% a disfrutar de las oportunidades de ocio que ofrece el archipiélago balear sin más ni más, está muy equivocado. No en vano ni por capricho parte del aparato administrativo de la Casa de Su Majestad el Rey se instala en las dependencias de la residencia de verano de la Familia Real Española. Allí han viajado hace unos días los integrantes del servicio de Seguridad, los del de Comunicaciones –CECOM–, Intendencia, Ayudantes de Campo del Rey, el Gabinete de Comunicación y, por supuesto, el Jefe de la Casa, Jaime Alfonsín o el Secretario General, Domingo Palomo. Don Felipe va a dedicar gran parte de las mañanas al trabajo de despacho y estará, como ya se dijo la semana pasada, en permanente contacto con la Presidenta del Congreso Meritxell Batet , que le tendrá al día de cualquier iniciativa que se produzca en el terreno político, de cara a la formación del nuevo Gobierno. Esta será la tónica a seguir cada jornada, incluso los días que participe en la regata de la Copa del Rey, que no suele empezar hasta el mediodía, cuando el ‘embat’, el viento que recorre la bahía de Palma, empieza a soplar. Este año, más que nunca, prima el trabajo sobre el ocio.
Aunque los miembros del equipo de prensa del Palacio de la Zarzuela no hablan directamente de la inquietud del monarca por la situación de impasse en la vida política, sí que dejan caer que lo que menos preocupa en estos momentos al rey Felipe es tomar parte en la Copa de Vela en la que ha competido desde que era casi un niño. Así ha quedado demostrado al llegar a Palma tres días más tarde del inicio de la regata y aparecer por primera vez en el Club Náutico con la reina Doña Letizia y sus dos hijas al comienzo del cuarto día de la prueba de vela. La presencia de toda la Familia Real ha causado gran expectación mientras recorrían las instalaciones del Club que es sede de la regata y cuando se han desplazado a los pantalanes donde han subido al Aifos, el barco de la Armada en el compite el monarca. Él tiene comprometido oficialmente presidir la entrega de premios de la prueba náutica el sábado por la noche.
El lunes próximo, el rey recibirá en el Palacio de la Almudaina, administrado por Patrimonio Nacional, a las autoridades de las Islas Baleares: presidenta de la Comunidad, del Parlamento autonómico y otros organismos oficiales. También tiene ya fecha la recepción a la sociedad mallorquina, que da la oportunidad a un amplio número de ciudadanos de las Islas a conocer de cerca a los Reyes de España, hacerse selfies con ellos e intercambiar impresiones acerca de los temas más diversos. El acto será el próximo día 7 de Agosto y las invitaciones ya están siendo enviadas a los destinatarios. Es la cita social más esperada del verano para los mallorquines, al igual que la foto de familia de los Reyes con sus hijas –todavía sin fecha– es el punto álgido para los numerosos medios de comunicación que se desplazan cada año a la isla para obtener las imágenes más esperadas de las vacaciones reales.