Rajoy: «Todo Gobierno debe gestionar con responsabilidad los caudales públicos»
Silencio total sobre la detención del expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González.
Por segundo día, Mariano Rajoy, ha evitado las declaraciones. Ayer jueves, en su primera aparición pública tras destaparse la ‘Operación Lezo’. Y este viernes, en un viaje a Sevilla para presidir los actos conmemorativos del 25 aniversario del AVE.
La única referencia, muy velada, la ha hecho Rajoy en un discurso de rígido corte institucional, en el que ha advertido de que «todo Gobierno debe gestionar con responsabilidad los caudales públicos». La aseveración ha sido leída como una advertencia ante el último golpe de corrupción.
No ha habido, en cambio, mención directa a González, ni tampoco a Esperanza Aguirre. Ni antes de subir al tren, en la madrileña estación de Atocha-donde llegó acompañado de la presidenta madrileña, Cristina Cifuentes, y el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna- ni tampoco a su llegada a la capital andaluza, donde ha sido recibido por la presidenta de la Junta, Susana Díaz.
Ajeno a los escándalos, Rajoy ha anunciado una lluvia de inversiones en alta velocidad. En total, 1.300 millones, 500 de los cuales irán destinados a la adquisición de 15 nuevos trenes.
El jefe del Ejecutivo ha avanzado además que Renfe ofertará 250.000 plazas por 25 euros, la licitación en 2018 del tramo de AVE en Almodóvar del Río, una obra importante para la Comunidad y que servirá para reducir el tiempo de los tramos entre Sevilla y Málaga y Sevilla y Granada.
Rajoy ha valorado el «importantísimo esfuerzo inversor»- respuesta directa a la demanda que, unos minutos antes, le había hecho Díaz en su intervención-y ha puesto en valor la gestión de su Gobierno para que «las infraestructuras sean un activo de la marca país».
«Los españoles hemos sido capaces de hacer grandes cosas y estoy convencido de que lo vamos a seguir haciendo en el futuro», ha confiado.
Este jueves, en su primera aparición pública tras la detención, evitó también cualquier referencia al expresidente madrileño, aunque sí valoró, por sorpresa, su citación como testigo en el juicio del ‘caso Gürtel’. «Cumplir la ley y las resoluciones judiciales es obligado para todos y también para los gobernantes. Iré encantado», fueron sus únicas palabras.