El presidente de Gran Canaria cree que la llegada de pateras es un «chantaje» de Marruecos a España
El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales (NC), sostiene que el aumento «repentino» en la llegada de pateras responde a un intento por parte de Marruecos de «presionar» y «chantajear» a España «utilizando a Canarias como moneda de cambio» para que «no se interponga en sus planes expansionistas» en el Sahara.
En un artículo de opinión difundido este lunes por el Cabildo, Morales vincula la presión migratoria que sufre Canarias, que se ha intensificado de forma notable desde septiembre, con las leyes aprobadas por Rabat para ampliar su espacio marítimo en colisión con las aguas españolas y con el «ataque del Ejército marroquí a civiles saharauis que se manifestaban pacíficamente» en Guerguerat.
«Solo hace falta ver la concatenación de los hechos para llegar a la conclusión de que Marruecos está utilizando a Canarias como moneda de cambio para presionar al Estado español y que éste no se interponga en sus planes expansionistas sobre nuestras aguas y sobre el Sáhara Occidental, así como para evitar que asuma un papel más activo como potencia colonial del Sáhara y exija la celebración del referéndum y la culminación del proceso de descolonización de este territorio», argumenta el político nacionalista.
A su juicio, «esto también explicaría el aumento repentino de los flujos migratorios sobre nuestro archipiélago ya que sería una de las maneras que utilizaría el Reino Alauita para presionar a España en un momento de recrudecimiento del conflicto con el Sáhara Occidental».
En un artículo que titula «Inmigración y chantaje marroquí», Antonio Morales asegura que «es evidente que Marruecos tiene un control sobre su territorio como para poder frenar las llegadas de embarcaciones a nuestras costas, especialmente las de sus propios conciudadanos».
El presidente del Cabildo denuncia que Marruecos no solo se «apropia de las aguas saharauis» y fija sus «pretensiones sobre una parte de las aguas canarias», sino que también estaría maniobrando para controlar los recursos de metales estratégicos para la industria de la alta tecnología, como telurio y cobalto, que existen en Tropic y en otros montes submarinos situados al sur de El Hierro.
«Tan grave como lo anterior es la tibieza o incluso la pasividad con la que el Gobierno de España responde a las pretensiones anexionistas y la política de hechos consumados del país vecino», defiende Morales, que considera que el Gobierno de España «menosprecia y ningunea a Canarias, primando sus relaciones diplomáticas con Marruecos al bienestar de nuestro archipiélago».