LA IZQUIERDA HABLA DE "DELITO DE ODIO"

La Policía no tiene pruebas, por ahora, de que el asesinato de Samuel sea un «crimen homófobo»

Samuel
Crimen de Samuel Luiz Muñiz.
Luis Balcarce

La Policía no ha hallado ningún indicio hasta el momento de que la paliza mortal al joven Samuel Luiz Muñiz coruñés pueda enmarcarse dentro de un delito de odio. El delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, no ha confirmado que el asesinato de Samuel sea un crimen homófobo pese a que dirigentes de PSOE, Unidas Podemos y Más Madrid se han lanzado en plancha para utilizarlo políticamente insistiendo en el componente homófobo de la paliza.

«Se está trabajando en todas las vías posibles», ha afirmado Miñones, que ha recordado que la investigación está en sus primeros compases. «Con la investigación sabremos si se trata de un crimen homófobo o no», ha declarado. Además, Miñones ha tachado de «falsas» las informaciones que apuntaban a la detención de 13 sospechosos.

En el atestado policial no se recoge, hasta ahora, ningún motivo de homofobia en el asesinato y la hipótesis que se baraja es la de «pelea tumultuaria», según ha podido saber OKDIARIO.

No sería la primera vez que organizaciones vinculadas a la extrema izquierda tengan que tragarse sus palabras por apresurarse a calificar un crimen de homófobo por el simple hecho de rentabilizarlo políticamente y callar sobre otras cuando los agresores son magrebíes, como ocurrió en la brutal paliza a un joven en Terrassa para robarle.

La izquierda no tiene dudas: «Fue un delito de odio»

Sin esperar el resultado de las pesquisas policiales, dirigentes del PSOE, Podemos y Más Madrid se han apresurado a condenar el crimen de Samuel como «delito de odio».

«Todo mi cariño y apoyo para los familiares y amigos de Samuel. Y toda mi condena a este crimen de odio. Queremos un país libre de violencias en donde todos y todas se sientan libres por ser quienes son. Que se haga #JusticiaParaSamuel», ha señalado la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 y secretaria general de Podemos, Ione Belarra.

También la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha condenado el asesinato pidiendo construir entre todas y todos una sociedad más libre en la que no dejemos cabida al odio», ha añadido.

Eduardo Rubiño, presidente del Grupo Parlamentario de Más Madrid en la Asamblea de Madrid, que ha pedido «que se esclarezca cada detalle y que haya justicia». «Sus amigos insisten en el componente homófobo de la paliza que le mató y de confirmarse estaríamos ante un antes y un después en la escalada de LGTBIfobia en nuestro país», ha advertido.

También se ha sumado la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas: «Tenemos mucho trabajo por hacer para erradicar el odio. Luchemos juntos por la libertad y el respeto», ha añadido en su perfil de Twitter.

Por su parte, la vicepresidenta cuarta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha publicado: «¡Qué día triste! Reproche personal, social y jurídico para quienes desbordan brutalidad y homofobia».

El líder de Más País, Íñigo Errejón, ha asegurado que «Samuel no ha muerto», y ha pedido que «tiene que saberse la verdad y hacerse justicia» porque «quienes siembran el odio y quienes lo ejercen no pueden tener cabida entre nosotros».

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