Podemos pide a Batet un reglamento anti-Vox para «suspender» a sus diputados expulsados
Podemos ha pedido este martes a la presidenta del Congreso, la socialista Meritxell Batet, «endurecer» el Reglamento de la Cámara para «sancionar» y «suspender» a diputados que sean objeto de expulsiones arbitrarias, como ocurrió la semana pasada con un parlamentario de Vox, que fue instado a abandonar el hemiciclo tras llamar «bruja» desde su escaño a Laura Berja, interviniente del PSOE.
El diputado José María Sánchez García retiró el calificativo tras un breve receso y continuó en el Pleno, con una fuerte crítica de Vox a la controvertida interpretación que el vicepresidente primero de la Cámara, el socialista Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, había hecho del Reglamento para ordenar la expulsión de un diputado. De Celis sustituía a Batet en ese momento.
Este martes, el secretario tercero de la Mesa del Congreso y diputado de Unidas Podemos, Gerardo Pisarello, ha instado a Batet a reformar dicho Reglamento para introducir «sanciones más contundentes» y así ha hablado de impedir a un parlamentario asistir al siguiente Pleno o incluso suspenderle en su condición de tal, según fuentes parlamentarias consultadas por OKDIARIO.
Según ha declarado luego Pisarello en rueda de prensa, «son actitudes graves que buscan intimidar y generar miedo, y ello exige una actuación más contundente» con una «aplicación más estricta del reglamento». «No vamos a tolerar que la ultraderecha despliegue su matonismo político», ha afirmado.
Por su parte, según las mismas fuentes, el vicepresidente cuarto de la Mesa y diputado de Vox, Ignacio Gil Lázaro, ha tomado la palabra tras Pisarello para darle una réplica tajante. Gil Lázaro ha denunciado la «hipocresía» y el «cinismo» del representante de Podemos para atacar así a Vox cuando «todas las semanas los parlamentarios de Podemos compiten con los de otros grupos en insultar sistemáticamente durante los Plenos a los 52 diputados de Vox y a sus cuatro millones de votantes», según las fuentes parlamentarias citadas.
En esta misma legislatura, el ex líder de Podemos Pablo Iglesias llamó «parásitos» y «miserables» a la bancada de Vox desde la tribuna de oradores -tras la intervención de la diputada María Ruiz- y no recibió el más mínimo comentario de la presidenta Batet.
«Compromiso firme»
Respecto a esta cuestión sobre el Reglamento, Batet ha señalado que no era objeto de debate en la Mesa que se celebraba esta martes, apuntan tales fuentes. Sin embargo, el portavoz del Grupo Socialista, Héctor Gómez, ha revelado en rueda de prensa que hay un «compromiso firme» de Batet para abordar esta «escalada de conflicto».
«Confiamos en las decisiones que adopte la Presidencia para evitar que siga esta escalada de conflicto, de agresividad verbal, que no dignifica la actividad parlamentaria, donde el decoro y el respeto no pueden faltar. En ningún caso vamos a amparar esta dinámica», ha sentenciado el portavoz socialista.
Desde el Grupo Popular, su portavoz, Cuca Gamarra, ha rechazo la pretensión de Podemos subrayando que en el Congreso «hemos tenido episodios mucho más graves como el no acatamiento de Constitución, que no han tenido ni un sólo reproche por parte de los promotores de esta iniciativa».
Así, Gamarra ha afirmado que «no entendemos que quieran empañar los graves problemas que tiene este país hablando de suspender a un diputado con conductas que pueden no gustarnos, pero la condición de diputado es una cuestión demasiado importante para que quede en manos de una mayoría». PSOE y Podemos tienen la mayoría de la Mesa del Congreso, así como del Pleno con sus socios de la mayoría Frankenstein, esto es, nacionalistas, separatistas y proetarras.
Contra Gómez de Celis
También en rueda de prensa, el portavoz parlamentario de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, ha apuntado -sin nombrarlo- al vicepresidente primero, el socialista Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, y ha enfatizado que «siempre que se han producido incidentes han sido con el mismo presidente» de los cuatros que están habilitados. «A ver si el problema va a ser que hay una persona que ejerce la presidencia de manera poco proporcional y un poco sectaria», ha manifestado Espinosa de los Monteros.
Tras el episodio de la semana pasada, Batet llamó a su despacho al portavoz parlamentario de Vox para decirle que no se podía consentir que en el hemiciclo se cuestionase la labor de la Presidencia, la ejerciese quien la ejerciese, en este caso, fue su compañero de partido. Espinosa trasladó a Batet que la decisión de Gómez de Celis fue «errónea». La propia presidenta socialista también expulsó de una Diputación Permanente en 2019 a la secretaria general del grupo de Vox, Macarena Olona. Y más recientemente, permitió (sin ninguna advertencia) que una diputada de ERC gritara «fascista» a Olona junto a su escaño.
Al inicio del Pleno este martes, Batet ha pedido «respeto» y «educación» a los diputados, lamentando que «en demasiadas ocasiones» el uso de la libertad de expresión haya acabado siendo utilizado «de manera inadecuada, proyectando insultos u ofensas a personas e instituciones».