El plano del Gobierno para exhumar en el Valle incluye el uso del altar de la Capilla

El plan del Gobierno para llevar a cabo las exhumaciones en el Valle de los Caídos incluye el uso parcial de capillas como “vestuarios”: pero un plano de Patrimonio Nacional al que ha tenido acceso OKDIARIO revela no solamente ese punto, sino algo más: el dibujo de las zonas que pretenden utilizar los empleados para las labores de extracción y limpieza de los huesos de los columbarios incluye directamente el altar de la Capilla del Santo Sepulcro.

El documento desglosa diversos puntos. Uno de ellos, “las características del equipo forense”. Allí señala que “para una tarea de la complejidad que se presenta es necesario contar con equipos de expertos en antropología forense con experiencia contrastada y que puedan dedicar su atención de forma exclusiva a este trabajo durante un tiempo determinado”.

Los tiempos de estancia, por lo tanto, para llevar a cabo estas labores serían dilatados: “Un cálculo aproximado de tiempo y expertos que se propone es el de 5 antropólogos forenses (uno de ellos coordinador de identificación) y dos técnicos para llevar a cabo el proceso de acondicionamiento y análisis, en dedicación exclusiva, en una primera fase, de al menos un mes de duración, ampliable en función de las circunstancias. En cualquier caso, este periodo de tiempo se deberá ampliar de forma indeterminada en el caso de que los análisis procedentes del laboratorio encargado de realizar el cotejo”.

Los expertos desplazados serán “funcionarios del Cuerpo Nacional de Médicos Forenses, personal laboral del Ministerio de Justicia o de CA con competencias en la materia, y facultativos o ayudantes de laboratorio del Instituto Nacional de Toxicología y CCFF. Este perfil profesional es recomendable por el carácter oficial de su categoría y por el hecho de que las actuaciones proceden de unas diligencias judiciales”, tal y como señala el documento.

Cuatro antropólogos

En otro apartado, sin embargo, estira ese periodo de tiempo: “El tiempo necesario para llevar a cabo el estudio antropológico forense de los restos que contuvieran las cajas, si bien es francamente difícil de determinar a priori, podría alcanzar los tres meses de trabajo para un equipo de cuatro antropólogos expertos en casos complejos de restos mezclados además de precisar un quinto experto que actuaría como coordinador de identificación y dos ayudantes, más los genetistas”. Todos ellos tendrán que operar en distintas áreas. Entre ellas, las capillas del crucero del Valle de los Caídos.

OKDIARIO ya ha desvelado que el plan de exhumaciones de víctimas del franquismo en el Valle de los Caídos ha incluido un nuevo y polémico punto: el uso de las capillas del crucero como “vestuario” para los operarios que harán las exhumaciones, además de como “almacén de columbarios”.

Fuentes internas apuntan a que la intención del Gobierno no es impedir el desarrollo de las funciones religiosas de las capillas. Pero resulta complicado pensar que, con una separación de “mamparas portátiles”, como detalla el proyecto, pudieran estar, en una parte de la capilla unos señores haciendo uso del vestuario, y más allá del biombo se estuviera desarrollando una ceremonia religiosa.

El informe relativo a la planificación de la intervención forense en el Valle de los Caídos, firmado por el Ministerio de la Presidencia, recoge otro apartado sobre las «necesidades materiales para la exhumación en el Valle de los Caídos» donde se detalla el uso de las instalaciones religiosas para llevar a cabo los trabajos necesarios.
 El texto de ese apartado señala que «una vez establecido el plan para llevar a cabo las exhumaciones que se han requerido en donde se perfila la metodología que se debe aplicar así como las características del equipo técnico, resulta necesario considerar los medios materiales que puedan requerir los técnicos forenses».

Para ello, detalla las necesidades como la de contar con “algunos medios materiales que consisten, principalmente en espacio de almacenamiento, de vestuario y de oficina. En casos equivalentes en los que el equipo forense ha intervenido, la experiencia demuestra que se necesita disponer in situ de un área llamada ‘de limpio’ y otra llamada ‘de sucio’ donde se realizaría el trabajo principal”.

Por ello, “requiere” que se destine “la Capilla del Santo Sepulcro para vestuario y laboratorio forense provisional de campo a través de la instalación de mamparas de separación portátiles o móviles. Al mismo tiempo, y como complemento a lo anterior, se podría aprovechar el túnel de comunicación entre las denominadas Capilla del Santo Sepulcro y Capilla del Santísimo con fines de almacenamiento de algunas cajas de restos o columbarios de forma breve o temporal mientras se analiza cada uno de los espacios o pisos de las capillas en cuestión”.

Pero, para colmo, el plano que hoy muestra este diario refleja cómo se emplearía la parte del altar.