Nuevo ataque de los narcos en Cádiz: embisten a la Guardia Civil tras descargar un cargamento de tabaco

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Coche camuflado de la Guardia Civil tras un nuevo ataque de los narcos. (Foto: AUGC Cádiz)
Paloma Guardia

La violencia de los narcotraficantes no cesa en Cádiz. Este jueves ha sido detenido un hombre en la playa de Puente Mayorga (San Roque, Cádiz) después de embestir un vehículo de la Guardia Civil. El detenido se encontraba alijando tabaco de contrabando cuando fue sorprendido por los agentes, a los que embistió con su coche cuando intentaba huir.

Los hechos se produjeron cuando un dispositivo de la vigilancia de la Guardia Civil se dio cuenta de que se estaba produciendo una operación de desembarco de tabaco en la playa de Puente Mayorga.

La patrulla de la Guardia Civil se percató de la operación de narcotráfico, pero la embarcación desde la que se estaba produciendo el alijo se dio a la fuga, y sólo quedó en la playa el conductor de un vehículo donde habían introducido varios paquetes de tabaco -ocupando todo el espacio del coche menos el asiento del conductor-.

Una vez que el detenido se dio cuenta de la situación, intentó darse a la fuga, pero no lo consiguió. Un vehículo camuflado de la Guardia Civil intervino para impedir que el narcotraficante se marchase y trató de cortarle el paso. Sin embargo, el detenido no paró, y empotró de forma violenta el coche de los guardias civiles.

Como los coches quedaron inutilizados la huida continuó a pie, intentado el presunto narcotraficante escapar a nado por la playa. Donde finalmente fue detenido.

Ha sido la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUCG) de Cádiz quien ha informado del suceso en una publicación en sus redes sociales. «La violencia continua en la provincia de Cádiz. Esta noche, un vehículo cargado de tabaco de contrabando en su fuga ha embestido a un vehículo policial. Pero según el Ministerio de Interior, todo en orden», reza la publicación.

Un mensaje donde han aprovechado desde la asociación para resaltar una vez más la terrible situación y el peligro que se vive en Cádiz con los narcotraficantes y la inacción del Gobierno y del ministro de Interior Fernando Grande-Marlaska.

Todo ello en medio de un contexto de tensión por el terrible asesinato que tuvo lugar en la noche del pasado viernes 9 de febrero, donde dos guardias civiles fueron cruelmente asesinados por una narcolancha en una operación contra el tráfico de drogas en Barbate (Cádiz).

Como se puede observar en las imágenes que acompañan a estas líneas, de nuevo, queda en clara evidencia la precaria situación de los medios de los que disponen los agentes para luchar contra este tipo de delincuencia. En esta ocasión -a diferencia de lo ocurrido en Barbate- el presunto narcotraficante detenido conducía un vehículo similar al de los agentes, y aunque les embistió con violencia, los daños sólo se produjeron en el vehículo.

Dos policías asesinados en Barbate

No ocurrió lo mismo la noche del pasado viernes en Barbate, cuando dos guardias civiles fueron asesinados y otros cuatro resultaron heridos, tras ser embestidos por una narcolancha en Barbate (Cádiz).

Los agentes fallecidos realizaban labores de vigilancia con otros cuatro compañeros en una pequeña embarcación de goma de unos cinco metros cuando fueron alcanzados por una narcolancha de unos 14 metros y tres o cuatro motores que los embistió y los pasó por encima.

Uno de los agentes fallecidos pertenecía al Grupo de Actividades Subacuáticas. Otro, a los Grupos de Respuesta Rápida. Ambos tenían entre 30 y 40 años de edad.

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