Ni un liberado sindical sanitario ha pedido volver al trabajo para vacunar contra el Covid en Madrid
Las críticas de los sindicatos madrileños del sector sanitario contra el Gobierno de Madrid no han cesado en plena pandemia. Y ello, pese a que, en especial durante la segunda ola, Madrid ha conseguido mantener un nivel de asistencia hospitalaria claramente superior al de otras comunidades autónomas como Castilla-La Mancha, Cataluña o la Comunidad Valenciana.
Pero los sindicatos no han dejado de criticar las medidas de Isabel Díaz Ayuso contra el Covid: desde la creación de un nuevo hospital público contra el coronavirus -el Zendal-, hasta la decisión de reservar la segunda dosis de la vacuna para los receptores. Uno de los puntos en los que más han arreciado la críticas ha sido por la falta de médicos o enfermeros para administrar las vacunas contra el Covid. Pues bien, de los 455 liberados del sector sanitario que tienen los hospitales de Madrid, ni uno ha solicitado abandonar temporalmente esa condición para ayudar en la vacunación. Todos han pensado que eran mucho más decisivos para ayudar en la pandemia siguiendo como liberados.
Las críticas de los sindicatos no han cesado en plena pandemia. Uno de los más activos ha sido el Sindicato de Enfermería, SATSE, que ha reclamado a las distintas consejerías de Sanidad de las comunidades autónomas que “aumenten sus plantillas de enfermeras y enfermeros en Atención Primaria para que la campaña de vacunación del Covid-19 pueda desarrollarse de forma eficaz, segura y ágil, sobre todo cuando se inicie la fase de administración de la vacuna de manera más generalizada”.
SATSE ha dirigido esa exigencia y crítica, también, ante el actual equipo de Gobierno de la Comunidad de Madrid. Subraya, por ejemplo, que, “pese al compromiso adquirido por los distintos partidos políticos en la Comisión para la Reconstrucción Económica y Social en el Congreso de los Diputados y transcurridos más de nueve meses desde el inicio de la pandemia en nuestro país, la mayoría de las administraciones sanitarias competentes no han reforzado como deberían sus respectivas plantillas de enfermeras y enfermeros, tanto en los hospitales como en los centros de salud o en los centros sociosanitarios”.
Los cálculos de SATSE apunta a que España sufre un “déficit de más de 15.000 enfermeras y enfermeros en los centros de salud que repercute muy negativamente en la atención y cuidados que se debe prestar a pacientes y ciudadanía y que puede afectar también a la campaña de administración de la vacuna del Covid-19 a lo largo de los próximos meses”.
Críticas sindicales
No se trata de la única crítica. El hospital Zendal, público y creado por el actual equipo de Gobierno de la Comunidad de Madrid para atender las puntas de ingreso de enfermos provocadas por pandemias como el Covid, también ha sido un objeto clásico de las críticas. En este caso, la reacción ha sido conjunta de “las organizaciones sindicales de la Mesa Sectorial de Sanidad ante la negativa de la Comunidad de Madrid de dotar de personal propio al Zendal”.
Los sindicatos firmantes son SATSE, CCOO, UGT, CSIT Unión Profesional y el sindicato médico AMYTS. Y en un comunicado conjunto han señalado que “tras haber celebrado tres reuniones monográficas de la Mesa Sectorial de Sanidad en los últimos días, para abordar los problemas derivados del Hospital de Emergencias Enfermera Isabel Zendal (HEEIZ), las cinco organizaciones sindicales presentes en este foro queremos manifestar nuestro férreo posicionamiento sobre las siguientes cuestiones: oposición rotunda al traslado forzoso de profesionales del resto de hospitales hacia el HEEIZ en un momento asistencial insostenible para todos los centros […]. El sistema de cobertura de los puestos de trabajo en el HEEIZ está aumentando el estrés de los profesionales […]. Es imprescindible que un centro hospitalario tenga plantilla propia para poder atender a sus pacientes […]. TODOS los profesionales del SERMAS siguen sin ver ni un solo detalle de agradecimiento por parte de la Consejería de Sanidad que pueda compensar el esfuerzo, el compromiso y la entrega absoluta que han tenido durante este último año, en el que hemos sufrido desgraciadamente los peores meses de la sanidad madrileña, que empezaron con la explosión Covid y que continúa con la tormenta Filomena, la sobrecarga por vacunación, etc”.
Y, pese a todo ello -que sus propias formaciones sindicales denuncian- el número de liberados sindicales que han pedido incorporase como actores de la campaña de vacunación ha sido cero.
Es más, sus sindicatos han llegado a convocar una “huelga general” en pleno coronavirus. El 16 de noviembre, “las organizaciones sindicales que componen la Mesa Sectorial de Sanidad de la Comunidad de Madrid: SATSE, CC.OO, AMYTS, CSIT, UGT y USAE”, anunciaron “la convocatoria de cuatro jornadas de huelga general en el sector sanitario para los días 26 y 27 de noviembre y 4 y 5 de diciembre”.