EL ESCÁNDALO SEXUAL DE ÁBALOS

La ley del silencio se impone en el Parador de Teruel: los empleados callan bajo amenaza de represalias

Parador de Teruel.
Parador de Teruel.
Paula Ciordia

La exclusiva de OKDIARIO destapando los destrozos ocasionados por el ex ministro José Luis Ábalos en el Parador de Teruel tras una desenfrenada fiesta con prostitutas ha extendido un manto de silencio sobre el establecimiento hotelero. Fuentes cercanas al parador describen un clima de tensión y hermetismo entre los trabajadores, quienes parecen haberse acogido a una suerte de omertá improvisada tras los acontecimientos de aquella noche de septiembre de 2020.

«Nadie quiere hablar. Es como si existiera un pacto tácito de silencio», comenta bajo condición de anonimato un vecino del Parador. «Desde que la noticia salió en los medios, la presión ha ido en aumento». Según esta fuente, al menos tres trabajadores que fueron testigos de los hechos han recibido llamadas instándoles a mantener la discreción absoluta sobre lo ocurrido.

La omertá parece haberse instalado en los pasillos del histórico edificio turolense. Los empleados evitan los corrillos, las conversaciones se interrumpen cuando se acerca alguien ajeno al personal, y las preguntas sobre aquella noche son recibidas con miradas evasivas, tal como ha podido comprobar OKDIARIO.

Algunos trabajadores han presuntamente denunciado veladas amenazas. «No son amenazas directas, pero el mensaje está claro: quien hable puede sufrir consecuencias laborales», asegura otra vecina que prefiere no revelar su identidad. «Les han recomendado no atender a la prensa y derivar cualquier pregunta a la dirección central de Paradores».

Fuentes locales reconocen que existe una consigna no escrita de no comentar el asunto. Es como si hubiera órdenes de arriba. Nadie quiere verse salpicado por este escándalo. El mensaje es claro: quien rompa el silencio se expone a represalias.

Lo último en España

Últimas noticias