El letrado purgado del Congreso: «La amnistía no puede volver a Comisión, hay que hacer una ley nueva»
Manuel Fernández-Fontecha asegura que se ha hecho una "interpretación errónea" del Reglamento
Sostiene que la Comisión de Justicia no puede volver a tramitar un texto que ha sido rechazado por el Pleno
El letrado Manuel Fernández-Fontecha -que fue purgado de la Comisión Constitucional del Congreso por el secretario general de la Cámara y ex cargo socialista, Fernando Galindo- asegura que la Ley de Amnistía «no puede volver» a la Comisión de Justicia «porque decayó» en la votación que se produjo el pasado martes, en la que Junts per Catalunya, como se recordará, votó en contra.
Esa votación se desarrolló en varias fases. Primero se votaron las enmiendas -entre ellas, la de Junts que pedía suprimir el delito de terrorismo y que fue rechazada-; después, el dictamen -el texto que se había ya aprobado en la Comisión de Justicia- y, por último, el texto final de la ley orgánica.
El Pleno del Congreso -con el voto del PSOE y sus socios- sí aprobó el dictamen, pero no prosperó la votación final de la amnistía. Y esa última votación, subraya el letrado Fernández-Fontecha, «se impone» sobre el resto.
El reglamento del Congreso (artículo 131.2) establece que, para salir aprobada, una ley orgánica -como es el caso- debe contar con mayoría absoluta. En caso contrario, se devuelve a la comisión correspondiente -en este caso, la de Justicia-, que debe emitir un nuevo dictamen en el plazo de un mes.
Se da la circunstancia de que la amnistía ni siquiera logró una mayoría simple -más síes que noes- por lo que, según apunta este letrado, se entiende que ha decaído y tendría que iniciarse de nuevo el procedimiento. Es decir, la ley tendría que ser registrada de nuevo en el Congreso para comenzar otra vez todo el trámite parlamentario.
«Interpretación errónea»
Así lo afirma en conversación con OKDIARIO este experto jurista, denunciando que «se ha hecho una interpretación errónea» del reglamento. Fernández-Fontecha explica que una ley podrá volver a la comisión cuando no se alcanzan los 176 votos de la mayoría absoluta pero sí se logran más síes que noes.
La amnistía apenas consiguió 171 votos a favor y 178 en contra. «Eso significa que la proposición de ley orgánica ha sido rechazada y la Comisión no puede volver a emitir dictamen sobre una iniciativa rechazada en votación final por el Pleno», remarca el letrado que estaba adscrito a la Comisión Constitucional del Congreso.
Pese a ello, la presidenta del Congreso, la socialista Francina Armengol, anunció tras conocerse el resultado de la votación que la ley volvería a la comisión de Justicia, donde se dispondrá de un plazo para negociar las enmiendas y pactar un nuevo texto que será sometido de nuevo a la votación del Pleno. De respetarse el reglamento, el procedimiento tendría que arrancar de nuevo, dilatándose así la aprobación de la ley. La intención del Gobierno es que la amnistía esté lista ya en primavera.
No hay precedente
El letrado explica que lo ocurrido en esta ocasión no tiene precedente, nunca antes una Comisión volvió a tramitar una iniciativa que había recibido dicho rechazo por el hemiciclo. Los dos únicos casos en Democracia en que las leyes fueron devueltas a la Comisión por falta de mayoría absoluta se trataron de textos que sí contaron con más síes que noes en la votación final de conjunto. Ambos fueron relativos a reformas de la Ley del Poder Judicial en la primera legislatura de José María Aznar.
En 1999 se tramitó una de tales reformas que acompañaba a un proyecto de Ley de Enjuiciamiento Civil (LEC) y en la votación final por su rango orgánico no se alcanzó la mayoría absoluta necesaria para pasar al Senado, pero sí hubo más síes que noes, es decir, una mayoría simple a favor, siendo devuelta por tanto a la Comisión de Justicia para una nueva negociación y dictamen, que nunca volvió a tramitarse. De los 323 votos emitidos, 154 del PP fueron a favor frente a 141 en contra de PSOE, PNV y Mixto, y 28 abstenciones de IU, CiU y CC.
En cambio, la actual proposición de ley de olvido penal tuvo más noes que ‘síes’ el pasado martes, es decir, obtuvo 179 votos en contra frente a 171 votos a favor. Fue rechazada por la Cámara baja. Y, por tanto, la amnistía no puede volver a la Comisión, según señala Fernández-Fontecha, letrado del Congreso.
La otra reforma del Poder Judicial data de 1997 y en la votación de conjunto también hubo más votos a favor (169 de PP, CiU, PNV y CC) que en contra (15 de IU). Aquel 5 de junio de 1997, el PP de José María Aznar se confió y con 8 diputados ausentes, incluido el presidente, no llegó a la mayoría absoluta necesaria. Además, hubo 139 abstenciones, fundamentalmente del Grupo Socialista. En todo caso, el PP logró más síes que noes y por ello el texto fue devuelto a la Comisión, mientras que el pasado martes el texto de la amnistía del PSOE tuvo más votos en contra que a favor. Con todo, los populares de Aznar recondujeron la situación y aquella reforma salió adelante tras aprobarse un nuevo dictamen en comisión veinte días después de no prosperar a la primera en el hemiciclo
«Es más grave»
Más recientemente, el año pasado, el PSOE y sus socios ni siquiera aprobaron el dictamen sobre la reforma de la ley de Seguridad Ciudadana en la Comisión de Interior. El texto fue rechazado y ni siquiera llegó al Pleno para su votación de conjunto. De este modo, se paralizó la tramitación de dicha proposición de reforma de ley orgánica y la iniciativa caducó. No se reenvió a la ponencia para nuevo estudio. En comparación con ello, «el caso de la proposición de Ley de Amnistía es más grave porque era la votación final sobre el conjunto del texto, en la que se obtuvo mayoría absoluta pero en contra», remarca Manuel Fernández-Fontecha. «¿Cómo va a tramitar la Comisión una iniciativa que ha sido rechazada por el Pleno?», plantea el experto.