El juez imputa a Barrabés, el socio de Begoña Gómez, tras haberlo solicitado Vox

El juez Juan Carlos Peinado ha imputado por tráfico de influencias y corrupción en los negocios al empresario Juan Carlos Barrabés, socio de Begoña Gómez, que será nuevamente citado a declarar. Barrabés declaró como testigo el pasado lunes y reconoció dos encuentros con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en La Moncloa. El cambio de estatus procesal para el socio de la mujer del presidente lo ha decretado el juez a petición de Vox, que está personado en la causa como acusación particular.

Según explicó el empresario, en dichas reuniones habló con Sánchez de «innovación empresarial», si bien aseguró que no recordaba la fecha de esas citas.

Según ha adelantado el diario El Correo y ha podido confirmar OKDIARIO, el juez ha adoptado la decisión tras escuchar a Barrabés, el pasado lunes, y el empresario tendrá que volver a declarar el próximo 29 de julio.

Gómez se niega a declarar

Este viernes, Begoña Gómez se negó a declarar ante el juez, alegando falta de garantías en el procedimiento que se dirige en su contra por presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios.

«Estamos en un Estado de Derecho, en una sociedad democrática avanzada, y la declaración del investigado tiene que hacerse con garantías», reprochó su abogado, Antonio Camacho.

Pocas horas después se ha conocido la imputación del socio de Begoña Gómez, que –como toda imputación– se produce por dos circunstancias: la apreciación de indicios de delito en la persona imputada –hasta ahora Barrabés sólo fue a declarar en calidad de testigo– y la garantía procesal de sus derechos de defensa –la condición de imputado refuerza la estrategia defensiva del afectado, que pasa a estar asistido por abogado y que puede negarse a declarar, algo que no puede hacer quien es llamado a declarar como testigo–.

Paso penalmente trascendente

El paso dado por el juez Peinado, por tanto, tiene esas dos consecuencias directas por los motivos apuntados: ser escrupuloso en el respeto de las garantías procesales, más aún ante la manifiesta estrategia jurídica y política de Begoña Gómez y del sanchismo de atacar al magistrado y de buscar el mínimo resquicio para tumbar su instrucción judicial; y la ampliación del perímetro de investigación que acecha a la esposa de Pedro Sánchez y, por tanto, al presidente y a su partido.

Esta ampliación del perímetro de investigación judicial es relevante, porque la sombra de la imputación se acerca peligrosamente al presidente Sánchez y al Gobierno. Y es que Barrabés es el nexo entre los negocios bajo sospecha de la ciudadana Begoña Gómez y los millones de dinero público que recalaron en las arcas privadas de Barrabés tras haberse convertido en influyente socio empresarial de Gómez.

Esa imputación de Carlos Barrabés anticipa una posible extensión de la acción investigadora del juez Peinado sobre la cadena de decisión político-administrativa que se activó para esas millonarias adjudicaciones que beneficiaron al empresario socio de Gómez. Y esa cadena político-administrativa alcanza al Gobierno.