Illa compra un sistema de espionaje para la unidad de los Mossos que persiguió a los constitucionalistas
Asuntos Internos podrá disponer de un sistema que permite interceptar llamadas telefónicas y cualquier comunicación
El Govern catalán de Salvador Illa ha adjudicado la puesta en funcionamiento de un sistema informático de interceptación de las comunicaciones destinado a los Mossos d’Esquadra. Un software espía muy similar al que utiliza actualmente Hacienda, y que tendrán a su disposición la División de Asuntos Internos (DAI) de Mossos, una unidad muy polémica en el cuerpo por haber sido punta de lanza del independentismo para castigar durante años a los agentes constitucionalistas. La adjudicación llega en pleno enfrentamiento interno entre familias políticas de los Mossos.
El valor estimado de este contrato, firmado por el Departamento de Interior de la Generalitat que dirige la socialista Nuria Parlón, asciende a 6,5 millones. Con ello, se busca dotar de servicios integrales de interceptación y monitorización de las comunicaciones en base a dos soluciones informáticas concretas denominadas Reliant y Hornet.
El sistema podrán utilizarlo en la Comisaría General de Investigación Criminal, en la Comisaría de General de Información y en la Comisaría General de Investigación Interna y Asuntos Disciplinarios. Las dos primeras se ocupan de materas como crimen organizado o terrorismo, mientras que la tercera es la polémica unidad a la que se le atribuyen las cazas de brujas encargadas por el independentismo contra los agentes constitucionalistas del cuerpo. En clave interna, en algunos círculos de Mossos se le denominaba «la Gestapo» de Carles Puigdemont y Quim Torra, dos de los presidentes que más la utilizaron por motivos políticos.
La adjudicataria ha sido la empresa española especializada en seguridad Excem Grupo 1971, S.A., que aporta soluciones de interceptación de comunicaciones a otras entidades del Estado como el Ministerio de Hacienda y la Agencia Tributaria.
Este sistema permite escuchar y recopilar llamadas telefónicas y todo tipo de comunicaciones por chat, incluso aunque estén encriptadas, e identificar a usuarios de teléfonos móviles. El sistema conjunto se divide en dos bloques, uno de interceptación de comunicaciones y otro de tipo táctico, capaz de ser utilizado desde un vehículo.
La adjudicación se produjo a finales del mes de agosto, tras la investidura de Illa y en pleno debate interno en los Mossos por los cambios que se avecinaban en una cúpula eminentemente independentista que había colocado a sus hombres afines por todo el escalafón de la policía autonómica. Desde algunas asociaciones de Mossos se ha pedido a la nueva administración del PSC que no se produzca una «caza de brujas».
Defensa de los Mossos
El Govern de Salvador Illa pidió en agosto que no se exigiera a los Mossos «que resuelvan todos los problemas que tenemos en la sociedad». Así lo afirmó la consellera de Interior y Seguridad Pública de la Generalitat de Cataluña, la socialista Núria Parlon. También reconoció que la policía autonómica había cometido «errores puntuales», como el que se produjo durante el dispositivo policial desplegado para tratar de detener a Carles Puigdemont, quien finalmente se volvió a fugar tras regresar a España para dar un mitin cerca del Parlament de Cataluña. «Evidentemente, en un dispositivo alguna vez puede haber un error, se habrá de valorar, se hará reflexionar y se hará de mejorar», señaló.
Núria Parlon se mostró así durante el acto de promoción de bienvenida a la 31ª promoción de los Mossos de la región metropolitana de Barcelona, celebrado en agosto. En este acto estuvo acompañada por el director general de la Policía, Pere Ferrer, y varios mandos policiales. Se trató de una de las primeras intervenciones de Parlon tras haber asumido su cargo en el Govern de la Generalitat liderado por Illa. «Evidentemente, no se le puede exigir al cuerpo de Mossos, ni a los agentes, resolver todos los problemas que tenemos en nuestra sociedad. Esta es tarea del Govern y, además, es una tarea que se ha de hacer desde una dimensión de coordinación y de transversalidad», apuntó.
«Pero sí que es verdad que ustedes son nuestros ojos. Estarán día a día en la calle patrullando, detectando los polos de la realidad y la preocupación de los ciudadanos. La preocupación del comercio, las actividades que harán su día a día serán fundamentales para mejorar la percepción de seguridad que tiene la ciudadanía. Porque es verdad que las dudas son razonablemente buenas. Las dudas siempre tienen esta dimensión a la estadística compleja que mejoremos y, por tanto, siempre se han de tener en consideración. Pero más importante es que para mejorar la percepción que la ciudadanía se dé seguridad», apostilló la dirigente del Govern de Illa durante el acto de los Mossos.