La hermana de la separatista Bassa reconoce que Torra había ordenado su puesta en libertad y luego se echó atrás

El martes el Govern de Torra ordenó a las cárceles catalanas dejar en libertad a los presos separatistas llegando a firmar el documento de salida de la prisión

Quim Torra
Dolors Bassa, la exconsejera catalana de Trabajo encarcelada por su implicación en la celebración del referéndum ilegal del 1-O., saluda entre Roger Torrent y Quim Torra. Foto: AFP
Joan Guirado

La hermana de la ex consejera separatista Dolors Bassa, la diputada en el Congreso por ERC Montse Bassa, ha reconocido en un tuit publicado anoche que su hermana iba a ser puesta en libertad por Quim Torra este jueves. Bassa, condenada a casi 10 años de cárcel por su papel en el referéndum ilegal del 1 de octubre, goza del 100.2 otorgado por la Generalitat para cuidar de su madre.

Precisamente gracias a ese 100.2, que este jueves permitió la salida de prisión de quince presos, el Govern de Quim Torra pretendía ponerla en libertad junto al resto de políticos catalanes encarcelados. El gobierno catalán, el martes, dio orden a las prisiones de proceder a la puesta en libertad a los presos independentistas. Todo estaba preparado pero les entró el miedo tras la advertencia del Tribunal Supremo. Ese aviso paralizó la operación.

Montse Bassa, ingresada en el hospital de Figueres por coronavirus, afirmó anoche que ya tenía el permiso para salir ayer jueves de la prisión firmado y que a última hora se paralizó la junta de tratamiento que debía ejecutar la salida. En su publicación denuncia «que tenemos el enemigo en Madrid ya lo sabíamos. Lo que no sabía es que lo teníamos también en casa» en referencia a la actitud de su compañera de partido Ester Capella, consejera de Justicia, y el propio Quim Torra.

La hermana de Bassa no es la única que sublevado contra el gobierno autonómico catalán. También su hijo, Bep Surroca, les advierte que «si le pasa algo a mi madre…ya no será culpa del Supremo». La esposa del ex consejero Jordi Turull, Blanca Bragulat, también se ha quejado de la marcha atrás del Govern de Torra. Apunta Bragulat que «a partir de ahora tal vez que cuando los nombres hablen de políticos presos».

Hoy el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha remitido una carta a la Alta Comisionada por los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, asegurando que «las amenazas del Supremo impiden cumplir sus indicaciones sobre los presos políticos».

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