El golpista Junqueras se felicita por haber contribuido a derogar el delito de sedición
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha dicho que está satisfecho de haber trabajado en la derogación de la sedición
El juez Llarena aplica a Puigdemont la derogación de la sedición aprobada por Sánchez
El presidente de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), Oriol Junqueras, se ha felicitado por «haber trabajado en la derogación de la sedición». Así lo ha dicho a través de sus redes sociales donde también ha manifestado que se encuentra «satisfecho» por su contribución a la eliminación del tipo delictivo, por el que él mismo ha estado en prisión tres años y ocho meses hasta lograr el indulto del Gobierno de Pedro Sánchez. Además, Junqueras ha calificado el delito de sedición de «anacrónico» y que su eliminación definitiva es buena para toda la sociedad porque sin su existencia se pueden defender derechos fundamentales como «el derecho a voto o el derecho a manifestación con mejores condiciones y más garantías».
Junqueras no se esconde al celebrar la victoria que supone para el independentismo la eliminación del Código Penal del delito de sedición. El que cometieron, según la sentencia del Tribunal Constitucional, él mismo y el resto de los condenados por el golpe del 1-O. De hecho, se arroga a sí mismo haber «trabajado» en esa reforma, pactada y diseñada por ERC con el PSOE de Pedro Sánchez a cambio de su apoyo parlamentario.
Satisfet d’haver treballat en la derogació de la sedició. L’eliminació definitiva d’aquest delicte anacrònic és bo per a tota la societat, i ens permet defensar els drets fonamentals, com el dret a vot o el dret a manifestació, amb millors condicions i més garanties. Seguim!
— Oriol Junqueras 🎗️ (@junqueras) January 12, 2023
Oriol Junqueras fue condenado a 13 años de prisión por los delitos de sedición y malversación. Asimismo, la sentencia del procés condenaba a la ex presidenta del parlament de Cataluña, Carme Forcadell a 11 años de prisión y a los exconsejeros Jordi Turull, Raül Romeva y Dolors Bassa 12 años de prisión, por los mismos delitos que Junqueras: sedición y malversación.
Mientras la reforma de la malversación ya comienza a mostrar sus primeros efectos, con la revisión de condenas solicitada por abogados defensores de imputados por corrupción, el fin de la sedición supone casi de facto la «despenalización» de hechos tan graves como los ocurridos el 1 de octubre de 2017. Eso es lo que sostiene el magistrado del Supremo Pablo Llarena.
Puigdemont
Ahora que el delito de sedición ha sido derogado los autores principales del golpe de Estado podrán beneficiarse de una cierta impunidad. Este es el caso del ex presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, quien no será procesado como culpable de un delito de sedición.
En este sentido, el juez que instruye la causa del golpe del 1-O, Pablo Llarena considera que la derogación de la sedición plantea un «contexto cercano a la despenalización» de los hechos investigados, al no encajar en desórdenes públicos, tal y como adelantó OKDIARIO. Es decir, que la reforma legal aprobada por la mayoría parlamentaria que sostiene al Gobierno de Pedro Sánchez ha asegurado prácticamente la impunidad a los golpistas prófugos de la Justicia.