Pinza contra Llarena por la amnistía: Bolaños lo equipara con Vox y Junts le llama «Tejero sin bigote»

Félix Bolaños ha enviado un claro mensaje de presión este martes al juez Pablo Llarena al subrayar las diferencias que existen entre el Gobierno de Sánchez y el Tribunal Supremo respecto a la aplicación de la Ley de Amnistía de la que no se ha beneficiado por completo Carles Puigdemont, dado que el Alto Tribunal rechazó perdonar el delito de malversación al líder que volvió a fugarse hace unos días. Además, mientras que el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes ha identificado la postura del magistrado con la del «partido ultraderechista Vox», Junts se ha referido a Llarena como «Tejero sin bigote».

«Es una discrepancia que comparten todas las partes que están personadas en ese procedimiento, excepto Vox», ha insistido Bolaños, para remarcar esas coincidencias que existen, a su entender, entre el partido de Abascal y el juez que instruye el procés en el Alto Tribunal. Lo ha dicho así en compañía de Óscar Puente, con el que ha acudido a un acto en Níjar (Almería), precisamente un día después de que el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible apuntara que los jueces no deben «extralimitarse» en su interpretación de la Ley de Amnistía. Puente hacía alusión también al delito de malversación y a Puigdemont.

En este sentido, Bolaños ha dado a entender que apoya la postura de Puente, puesto que la posición del Ejecutivo de Pedro Sánchez ante «esa resolución judicial del Tribunal Supremo inaplicando la Ley de Amnistía» es «conocida»: «En su día mostramos nuestra discrepancia, tanto con los argumentos jurídicos como con las valoraciones políticas que hacía esa resolución del Tribunal Supremo».

«Tejero sin bigote»

Por otro lado, Junts ha acusado al Ejecutivo de Sánchez de «cobarde», precisamente por no «hacer» que la Ley de Amnistía beneficie al 100% a Carles Puigdemont. Ha sido el portavoz de los independentistas en el Senado, Eduardo Pujol Bonell, el que ha cargado este martes contra el Gobierno, y ha aprovechado su intervención para insultar a Pablo Llarena al referirse a él como «Tejero sin bigote».

Al tomar la palabra durante la comparecencia en la cámara del ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha denunciado que «estamos en pleno golpe de Estado judicial y Llarena es un Tejero sin bigote». Pujol ha ido más allá y ha continuado con la burla: «Hace cierta gracia el pequeño Tejero que la mayoría social española lleva aún dentro cuando se habla de Cataluña (…) ¿Qué es si no Llarena? ¿Qué son si no los Llarena?».

En otro orden de cosas, Bolaños, ha querido dejar claro que esa discrepancia  con la resolución judicial nada tiene que ver con la polémica por el show protagonizado por Carles Puigdemont con su nueva huida, facilitada por el incumplimiento de la orden judicial para la detención del fugado durante su asistencia a la toma de posesión de Salvador Illa como presidente de la Generalitat. «Sin ninguna duda, esa orden de detención hay que aplicarla (…) Esta mañana el Ministerio de Interior va a dar respuesta a esa petición de información que hizo el Tribunal Supremo», ha añadido. El pasado viernes, el juez Llarena solicitó un informe a los Mossos d’Esquadra y al Ministerio de Interior sobre el operativo fallido.

Como ya hizo el pasado viernes, un día después del show de Puigdemont, Bolaños ha restado importancia al fracaso del operativo de los Mossos d’Esquadra para detener al líder de Junts al indicar que «lo importante» de la jornada era la investidura del socialista Illa. «El operativo que tenía que garantizar el debate de investidura del president Salvador Illa se desarrolló con normalidad», ha declarado, al mismo tiempo que ha señalado a la policía autonómica por la huida de Puigdemont al indicar que «la orden de detención era un operativo de los Mossos».

En cuanto a la responsabilidad que pudiera tener el Gobierno central, del que depende el control de las fronteras, ha justificado que los países implicados «son espacios Schengen y, por tanto, hay libertad de circulación entre ambos países y no hay control fronterizo». En este aspecto, reafirma también lo que dijo Puente este lunes, cuando afirmó que Puigdemont «estuvo rodeado de mossos durante buena parte de su acto en Barcelona, era la Generalitat y, por tanto, ahí recaen las responsabilidades», por lo que «no se le puede imputar ninguna al Gobierno de España».

Bolaños ha insistido en la decisión del Supremo de rechazar perdonar el delito de malversación a Puigdemont, y ha instado a esperar la respuesta de la Sala de Apelaciones del Alto Tribunal porque «somos un Estado de Derecho y contra las resoluciones contra las que uno discrepa, lo que cabe son presentar recursos».

Además, ha explicado que ha hecho partícipes a la Abogacía del Estado y la Fiscalía de las diferencias entre el Gobierno y el Supremo a las que ha aludido en un principio, para insistir en aguardar a que se pronuncie la Sala de Apelaciones y que «acoja los argumentos jurídicos muy potentes para la aplicación de una ley que es tan clara como es la Ley de Amnistía». «El propósito y la letra de la ley tiene una claridad meridiana», ha sentenciado.