La Generalitat catalana tiene un 40% más de empleados públicos que la Comunidad de Madrid

La frenética contratación de empleados públicos por parte de la Generalitat ha convertido a la Administración catalana en un gigante de funcionariado con un coste de más de 10.000 millones de euros al año. La mastodóntica nómina de la Generalitat se evidencia al compararla con la Comunidad de Madrid: el Gobierno catalán del independentista Pere Aragonés tiene un 40% más empleados públicos que el Ejecutivo que preside Isabel Díaz Ayuso.

Como ha desvelado OKDIARIO a partir de documentos oficiales de la propia Generalitat, la Administración autonómica catalana tiene ya, como mínimo, unos 325.000 empleados públicos, del orden de 60.000 más que hace seis años, cuando lanzó el golpe independentista.

Esa cifra de funcionarios –entendido el término en su acepción genérica de empleado público– da como resultado una ratio de 0,041 por cada uno de los 7,9 millones de habitantes que tiene Cataluña. La Administración de la Comunidad de Madrid, sin embargo, tiene 197.000 empleados públicos, según su último recuento oficial publicado. Esta región tiene 6,9 millones de habitantes, de lo que resulta que en la Comunidad gobernada por Ayuso la ratio es de 0,029 funcionarios autonómicos por habitante. Cataluña, por tanto, tiene proporcionalmente un 40% más empleados públicos que Madrid.

La diferencia en coste también es enorme. Mientras que la Generalitat cerró el último año, 2023, con un gasto de personal que ronda los 10.500 millones de euros, en el Gobierno de la Comunidad de Madrid esta misma factura es de unos 9.300 millones. Es decir, el Ejecutivo de Ayuso gasta anualmente en personal del orden de 1.200 millones menos que la Generalitat catalana.

Es cierto que la Generalitat cuenta con policía autonómica, los Mossos d’Esquadra. Pero este hecho tampoco justifica que Cataluña cuente con una ratio de funcionarios autonómicos por habitante un 40% superior a la que registra la Comunidad de Madrid. Y es que de esos más de 320.000 empleados públicos que tiene a sueldo el Gobierno catalán, ni siquiera un 6% son mossos. Y eso que este apartado, el de la policía autonómica catalana, ha sido uno de los que más han engordado en los últimos años, desde el golpe independentista del otoño de 2017.

2.100 mossos más

Hace seis años, la plantilla de los Mossos la integraban 16.900 efectivos, mientras que en la actualidad son más de 19.000, siempre según los registros oficiales de la Generalitat que a los que ha tenido acceso OKDIARIO. Exactamente, el 31 de diciembre de 2017 había 16.945 mossos, mientras que el 30 de junio de 2023 –último registro oficial disponible– la cifra alcanzaba los 19.074 agentes y mandos.

Esas más de 2.000 plazas que la Generalitat ha cubierto en los Mossos en sólo seis años se han visto apuntaladas por una abultada transferencia de dinero extra del Estado al Gobierno catalán, específicamente para inflar la financiación de la policía autonómica. Por esta vía, el Ejecutivo de Sánchez le ha abonado a la Generalitat una subvención extraordinaria de 1.200 millones de euros en menos de tres años, tal y como desveló OKDIARIO el pasado 18 de diciembre.

Deuda y gasto desbocados

La enorme cifra de empleados públicos que acumula la Generalitat entronca con la estrategia de los secesionistas para emular estructuras de Estado. Esa estrategia la vienen desplegando, durante décadas, los sucesivos gobiernos autonómicos de corte nacionalista e independentista. Eso sin contar con que la creación de abundantes plazas de funcionarios es, desde antiguo, una fórmula recurrente para cultivar querencias entre la población que se beneficia de un sueldo público.

El desenfrenado desembarco de nuevos asalariados en la Generalitat choca con las depauperadas cuentas del Gobierno catalán. Ya lleva 11 años manteniéndose a flote a base de recibir privilegiadas inyecciones financieras de Moncloa, por la vía de los Mecanismos Extraordinarios de Financiación, conocidos popularmente por el que fue su instrumento estrella, el FLA (Fondo de Liquidez Autonómica).

La Comunidad de Madrid no debe ni un euro al Estado por el FLA; la Generalitat, a 30 de junio del año pasado –último dato certificado por el Banco de España–, ya le adeudaba 73.110 millones, y la factura pendiente suma y sigue. De ahí que el independentismo haya forzado la inclusión de la condonación de la deuda en el pacto de investidura con Pedro Sánchez. Se habla de un perdón de al menos 15.000 millones, pero está por concretar la cifra exacta.