PSOE

De Gabilondo a Besteiro: todos los candidatos que Sánchez impuso a dedo se estrellaron en las urnas

Todos los nombres que Sánchez ha impuesto, en algunos casos contra la militancia, han sido derrotados

Ver vídeo
Gabilondo, Hernández, Lobato, Espadas, Maroto y Besteiro.
Joan Guirado

Han sido todos ellos candidatos por ser apuestas personales de Pedro Sánchez. Desde Ángel Gabilondo hasta José Ramón Gómez Besteiro, pasando por Pepu Hernández, Juan Lobato, Juan Espadas y Reyes Maroto. Y todos han logrado el mismo resultado electoral: el mayor fracaso del PSOE en los gobiernos autonómicos y municipales en los que se han presentado. Dos de los cinco candidatos, además, no sólo han sido apuestas personales de Sánchez. En el caso de Besteiro y Maroto, además de ser aupados por el secretario general en el proceso de primarias fake obligatorias estatutariamente, la designación de ambos candidatos obligó a personas previamente elegidas por la militancia a tener que renunciar bajo amenazas de Ferraz.

Lo mismo que ahora ha ocurrido en la Comunidad Valenciana, con Alejandro Soler y Carlos Fernández Bielsa, a los que Santos Cerdán les prohibió presentarse a las primarias para relevar a Ximo Puig. Todo para que sea la apuesta de Pedro Sánchez, Diana Morant, la nueva secretaria general del PSPV. Elegida ya, también, a la búlgara y sin ningún rival elegible durante la votación.

Los datos de todas estas citas electorales demuestran que el olfato de Sánchez para elegir candidatos no es especialmente bueno. Sobre todo, desde la remodelación de la Ejecutiva, acometida tras el congreso de octubre de 2021 con el relevo de José Luis Ábalos en la Secretaría de Organización y la de verano de 2022, tras la dimisión de la que fuera vicesecretaria general Adriana Lastra y su sustitución por María Jesús Montero, donde todos los perfiles elegidos por el presidente del Gobierno se han estrellado.

Antes, no obstante, Sánchez ya se estrelló con su amigo Pepu Hernández en las municipales de Madrid de 2019, donde el ex seleccionador de baloncesto sólo logró 8 de los 57 concejales elegidos. En las elecciones a la Comunidad de Madrid de 2021, Gabilondo retrocedió de los 884.218 votos de 2019 a los 610.190. El ahora Defensor del Pueblo, cargo en el que fue recolocado por Sánchez tras ese fracaso electoral como candidato, perdió catorce diputados. Pasó de 37 a 14.

La primera víctima de esa debacle fue el que fuera secretario general del PSM José Manuel Franco, que accedió al poder orgánico, también aupado por el presidente del Gobierno -aunque como en Galicia le impuso un candidato impidiéndole serlo a él-. Pese a que Franco asumió la derrota a título personal, para calmar las aguas internas, el Gobierno le recompensó nombrándole presidente del Consejo Superior de Deportes y en mayo candidato del PSOE al Senado.

Un mes después de ese fracaso en Madrid, que dejó a Isabel Díaz Ayuso a dos escaños de la primera mayoría absoluta, Pedro Sánchez decidió hacerse con el control del PSOE de Andalucía y promocionar al ex alcalde de Sevilla Juan Espadas como nuevo líder del partido frente a Susana Díaz en las primarias. El presidente se salió con la suya, Espadas logró el control y un año después, en julio de 2022, conducía al PSOE a su peor resultado histórico en el feudo socialista. Con 30 escaños y 883.707 votos, el ahora recompensado portavoz del PSOE en el Senado facilitaba la primera mayoría absoluta del popular Juanma Moreno, que casi le dobló en diputados. Cuatro años antes, Susana Díaz había logrado 33 escaños y  1.009.243 votos.

En mayo del 2023, en las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo, que provocaron el adelanto de las elecciones generales del 23 de julio, Pedro Sánchez volvió a tropezar con sus apuestas personales. El PSOE andaluz de Espadas perdió prácticamente todo el poder municipal allí dónde eran fuertes, y Juan Lobato cayó a ser la tercera fuerza en Madrid tras una Ayuso con mayoría absoluta y un Más Madrid fortalecido.

La ex ministra de Industria Reyes Maroto, a la que Sánchez impuso a dedo, entre un enorme cabreo del PSM, que meses antes había elegido como candidata a la ahora diputada nacional Mercedes González -a la que Ferraz lo obligó a renunciar a ser alcaldable-, también quedó en tercera posición resignándose a una mayoría absoluta de José Luis Martínez Almeida.

Este domingo, la apuesta personal de Pedro Sánchez en Galicia ha seguido los pasos de Espadas al tocar suelo electoral en esta comunidad autónoma. José Ramón Gómez Besteiro ha caído a los nueve diputados. El secretario general del PSOE lo impuso como candidato, a la búlgara, y sin posibilidad de que tuviera rivales, con amenazas incluidas a quienes pensaran en presentarse.

Dos años antes, la militancia había elegido como secretario general a Valentín González Formoso, al que se le impidió ser candidato. Entre uno y otro, el presidente del Gobierno nombró al ex delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, como ministro de Sanidad con el objetivo de darlo a conocer como candidato a la Xunta. Pero no acabó de cuajar y la desimputación de Besteiro le rehabilitó políticamente.

Tras el fracaso de todos los candidatos impuestos por Sánchez al PSOE, el presidente ha vuelto a designar a dedo a la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, como relevo de Ximo Puig en la Comunidad Valenciana. Pese a que no cuenta con el respaldo de gran parte del partido a nivel territorial y que sólo ha logrado resultar elegida tras la obligación de Ferraz a los otros dos pretendientes, Soler y Bielsa, a renunciar a su deseo de pugnar por el liderazgo del partido.

Lo último en España

Últimas noticias