C’s desconocía la intención de su socio UPN de permitir la investidura de Sánchez
La intención de UPN de facilitar la investidura de Pedro Sánchez ha cogido por sorpresa a C's. El partido de Albert Rivera se ha desmarcado por completo de esta decisión.
La maniobra de Unión del Pueblo Navarro (UPN) de facilitar la investidura de Pedro Sánchez —con sus dos diputados— a cambio de que el PSN permita un gobierno de Navarra Suma ha descolocado a Ciudadanos, socio de coalición en Navarra junto al PP.
El partido desconocía la intención del partido de Javier Esparza -que es socio mayoritario en dicho acuerdo- de abrir la puerta a la abstención para que Sánchez llegue a La Moncloa. Los dos escaños de los navarros serían determinantes y permitirían al socialista prescindir de otros respaldos que no están garantizados, como el de Coalición Canaria. Con sus votos, en definitiva, Sánchez podrá ser investido.
UPN ha puesto dos condiciones para ese escenario: la primera, que el PSN permita un gobierno de Navarra Suma, en lugar de un acuerdo con nacionalistas e independentistas, como intentaba en los últimos días la líder de los socialistas navarros, María Chivite. La segunda, que Sánchez renuncie a cualquier pacto con los independentistas, a nivel nacional.
El PSN quedó en segunda posición en las elecciones del pasado 28 de abril, por detrás de Navarra Suma. La coalición de UPN, PP y Ciudadanos logró 20 diputados, a 6 de la mayoría absoluta. Pero Chivite intentaba un acuerdo de gobierno con Geroa Bai, de la presidenta en funciones Uxue Barkos, Podemos e I-E, donde está Izquierda Unida. Estas formaciones suman 23 escaños, también insuficientes, por lo que sería necesaria la abstención o apoyo de los 7 diputados de EH Bildu.
El presidente de UPN, Javier Esparza, comunicó este miércoles al rey Felipe VI su intención de investir a Sánchez y excusó así su decisión: «Defendemos una Navarra leal con un proyecto común que es España». Por ello, según Esparza, sería «perjudicial estar al albur de las decisiones del independentismo vasco o catalán». Formaciones, consideró, que «no pueden decidir sobre el futuro de todos los españoles».
La dirección nacional de Albert Rivera ha desautorizado la decisión del presidente de UPN, lo que deja el pacto navarro en una situación comprometida.
«Es un criterio de UPN que nosotros no compartimos. El PSOE debería permitir que los constitucionalistas, que hemos ganado las elecciones, gobernemos sin pedir nada a cambio. Ciudadanos desde luego mantendrá el compromiso con sus votantes y votará no a Sánchez», han advertido fuentes del partido. En Ciudadanos se reservan las posibles consecuencias que analizarán si ese escenario prospera.
El acuerdo obliga al consenso
En cualquier caso, el órdago de Esparza deja en una situación compleja a PP y C’s, en la encrucijada de facilitar un gobierno de Pedro Sánchez a cambio de que los proetarras no tengan influencia en el gobierno de Navarra.
El acuerdo de Navarra Suma, suscrito para concurrir a las elecciones del pasado 28-A, obliga, no obstante, a que una decisión de este tipo debe estar consensuada. En este caso, Esparza ha ido por libre.
El texto del acuerdo firmado entre UPN y C’s, por ejemplo, dice así: «Ante un proceso de investidura, si Albert Rivera es candidato a la investidura como presidente del Gobierno, los diputados de la coalición se comprometen a darle apoyo. En caso de que no se propusiera al candidato de Ciudadanos a la investidura los diputados de la coalición podrán dar apoyo a otro candidato siempre que este defienda los principios que inspiran esta coalición. En todo caso la decisión de apoyar a un candidato será acordada por consenso de los dos partidos firmantes del presente acuerdo de coalición».