Los CDR preparan una nueva revuelta en Cataluña si la Justicia inhabilita a Torra por los lazos amarillos
Quim Torra, presidente de la Generalitat, acaba de lanzar una comisión de investigación en el Parlamento catalán contra la actuación de los Mossos que se han jugado la vida defendiendo el Estado de Derecho. No contra los CDR que han destrozado e incendiado Barcelona en los últimos días, sino contra los policía autonómica. De este modo, la conexión del presidente de la Generalitat con los CDR volverá a demostrarse en breve si la Justicia decide finalmente inhabilitarle en el juicio de los lazos amarillos.
La investigación del comando CDR detenido con explosivos sigue apuntando a su relación directa con Torra. Las últimas informaciones judiciales apuntan a contactos telefónicos directos entre miembros de los CDR y el presidente de la Generalitat. Hay que recordar, además, que uno de los CDR detenidos afirmó que el propio Torra era el encargado de garantizar que se abrieran las puertas del Parlamento catalán para que el comando radical pudiera hacer detonar su explosivo dentro del legislativo regional.
Los últimos días en Cataluña, de hecho, se han convertido en un campo de batalla por los ataques y el terrorismo callejero perpetrado por los CDR.
Y ahora, según los datos a los que ha accedido la Policía Nacional, esos mismos comandos radicales separatistas están preparando ya una nueva y gran revuelta en caso de que la Justicia condene e inhabilite a Torra por poner los lazos amarillos –el símbolo del golpe separatista del 1-O y de la petición de impedir la labor del Supremo en su juicio– en sedes oficiales.
Torra debe pasar a juicio oral en menos de un mes, el 18 de noviembre, y será ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. Una comparecencia judicial en la que la Fiscalía buscará su inhabilitación durante un año y ocho meses por un delito de desobediencia tras haberse negado a quitar los lazos amarillos en las elecciones generales del pasado 28 abril. En esta misma causa, además, el Ministerio Público exige a Torra el pago de una multa adicional de 30.000 euros por la misma acusación.
Fuentes jurídicas aseguran que lo más probable es que Torra sea finalmente condenado y castigado a inhabilitación para cargo público y eso será, exclusivamente, por la acusación de los lazos amarillos. Hay que subrayar, además, que en la Audiencia Nacional el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, Manuel García-Castellón, y el juez de refuerzo, Alejandro Abascal, investigan ya otro asunto que también acorrala a Torra: el de los Comités de Defensa de la República (CDR) y el colectivo Tsunami Democràtic por un delito de terrorismo.
La respuesta de los CDR se planifica ya en estos momentos, éstos pretenden demostrar que Torra es un protegido del separatismo más radical que hay en estos momentos. Fuentes policiales han asegurado a OKDIARIO, además, que el plan de los extremistas consiste en volver a paralizar e incendiar la ciudad como muestra de su rechazo a la futura decisión judicial. Es más, el argumentario que barajan ya los comandos separatistas, une las dos sentencias –la del 1 de octubre y la de los lazos amarillos– en un mismo mensaje y con una única finalidad: dar por sentado que la Justicia española no es tal y que, además, se encuentra poco menos que en una cruzada para derrocar al movimiento separatista.