Belarra amenaza con expedientar y dejar fuera de las listas a los que vayan al acto de Díaz

El desacato de algunos barones y dirigentes de Podemos a las órdenes de la dirección amenaza a la configuración de las listas electorales de la formación morada de cara al 28 de mayo. El equipo de Ione Belarra ha advertido ya de la apertura de expedientes a aquellos candidatos podemitas que han confirmado su participación en el acto en el que Yolanda Díaz lanzará su proyecto Sumar, que tendrá lugar el próximo domingo. Unos expedientes que, según trasladan fuentes cercanas a la dirección, podrían comportar una reconfiguración de las listas a las municipales y autonómicas. Por ahora, la dirección de Podemos no prevé acudir al acto del próximo domingo, pese a la invitación explícita que les ha trasladado la ministra de Trabajo este miércoles.

La secretaria de Organización, Lilith Verstringe, es la encargada de vigilar de cerca los pronunciamientos de todos los cargos orgánicos e institucionales de Podemos. Y la responsable, junto a Montero -a la que Díaz rechaza como número 2-, de advertir de sus consecuencias a quienes incumplan las directrices. La dirección, que es quien tendrá la última palabra en la elaboración de las candidaturas electorales, tiene tiempo hasta el día 19 de abril para registrar a sus candidatos. Días suficientes para «cortar cabezas», como temen algunos.

Tal como reveló este martes OKDIARIO, cada vez son más las voces internas de la dirección de Podemos que presionan para que la organización esté presente con sus siglas en la presentación pública de Sumar. Sin embargo, Belarra y Montero -animadas por Pablo Iglesias- están llevando la negociación hasta el límite con el fin de conseguir un compromiso por escrito de Díaz de que se van a celebrar primarias abiertas. Una fórmula que el equipo de la vicepresidenta cree que «lo único que pretenden con eso es quedarse con el control orgánico» de Sumar. Algo que no está dispuesta a aceptar. No quiere ser la nueva Manuela Carmena.

El anuncio de los barones en Navarra, Begoña Alfaro, y Galicia, Borja San Ramón, confirmando su presencia ha caído como un jarro de agua fría en el cuartel general de Podemos. El núcleo duro de la dirección, encabezado por Belarra y Montero, y al ideólogo de la estrategia que están siguiendo, Pablo Iglesias, no les ha gustado nada que Alfaro y San Ramón confirmasen su asistencia mientras la dirección sigue presionando a Díaz para alcanzar un acuerdo antes del día 2. Ambos se suman así a los miembros de la dirección Jaume Asens, Antón Gómez Reino y Txema Guijarro que también dijeron que irían al acto. La eurodiputada Eugenia Rodríguez Palop, muy cercana a la dirección, también ha dicho que estará en el Magariños.

Lo mismo ha ocurrido con el pronunciamiento del barón balear y vicepresidente del Govern de les Illes, Juan Pedro Yllanes, que este miércoles ha manifestado su apoyo público a la vicepresidenta segunda y líder de Sumar. Aunque en el caso del ex juez, muy cercano a Pablo Iglesias, ya ha dejado claro que no va a poder acudir al acto del próximo domingo por un problema de agenda. Sin embargo el hecho de tomar partida por la ministra de Trabajo, en plena pugna de la dirección de su partido con el equipo de Díaz por la fórmula en cómo deben confluir, ha sido interpretado como «una deslealtad».